Cartel de Ecisa y Urbas en el perímetro del parque de La Torreta de Alicante, en imagen de archivo. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. La promotora cotizada Urbas, dueña de la constructora alicantina Ecisa prepara el plan de reestructuración de la empresa del sector de la construcción. Así, Ecisa se encuentra ahora mismo en pleno proceso de comunicación y negociación con sus acreedores. En este camino, tal y como explican desde Urbas a este diario, se ha designado a Kroll Advisory como experto en reestructuraciones. Además, plantean que el plan que se diseñe para Ecisa siga un planteamiento similar al de Murias, constructora vasca, también de Urbas, que ha presentado su plan de viabilidad que hicieron público el 22 de marzo.
Así, el nuevo Plan Estratégico que presentó Urbas en su Junta General de Accionistas de 2023 ya contemplaba el proceso de reestructuración ordenada de las empresas constructoras del grupo, con la alicantina Ecisa dentro de ellas. Se trata de un plan de reestructuración que únicamente se aplica a la rama de construcción del grupo. En este sentido, no afecta a ninguna otra área de negocio como pueden ser la de promoción inmobiliaria, energía e industria o 'Healthcare' y servicios.
En este sentido, la "reestructuración ordenada", tal y como detalla Urbas a este medio va dirigida a ordenar las constructoras adquiridas en los últimos años -Ecisa está entre ellas- y adecuarlas "a la nueva coyuntura del sector". Además, quieren asegurar su competitividad y el "crecimiento de esta línea de negocio" ante los cambios significativos del sector de la construcción en España. También ponen el foco en la preparación para "futuros requerimientos y exigencias de los mercados globales".
El grupo Urbas pone el foco de esas "nuevas exigencias" del mercado y de la construcción fijándose en el "impulso de la actividad internacional" en sectores como el agua, el gas, las energías renovables y las infraestructuras sostenibles, con mayor impulso de la obra civil.
Precisamente, las líneas recién presentadas por el Plan de Viabilidad de Murias podrían ser las que definan también al de Ecisa, que ahora está en plena negociación. Estas serían, principalmente, el pago del 100% de la deuda y, además, no se contemplan quitas a las deudas comerciales con proveedores ni a los créditos financieros ordinarios. En este caso, Urbas realizará el esfuerzo de asumir los créditos ordinarios a través de la emisión y entrega de bonos convertibles en acciones propias.
Murias también tendrá que garantizar la viabilidad del negocio manteniendo el empleo y las operaciones. En este sentido, -el del mantenimiento de operaciones- para Murias, sus obras de la cartera actual continuarán en marcha. Por parte de Urbas se apoyará la actividad aportando negocio nuevo procedente de obras intragrupo, valorado en 117 millones a ejecutar entre 2024 y 2028. El camino para Ecisa promete ser similar.
Tal y como ha venido publicando este diario, algunos de los contratos de Ecisa en la provincia se han quedado en el aire. Así, ha atravesado momentos delicados con varias rescisiones de contratos por incumplimiento. Por ejemplo, en cuanto al del centro de salud del barrio de Garbinet, en Alicante, la Conselleria de Sanidad acaba de formalizar la rescisión del contrato por el que se adjudicó su construcción a Ecisa y Joca (ambas integradas en el Grupo Urbas) hace más de un año y medio. El Consell volverá a contratar las obras con un segundo concurso.
También, en obras que dependen del Ayuntamiento de Alicante está, desde febrero de 2023, la ruptura del contrato del parque de La Torreta ante la renuncia de la UTE Ecisa-Urrutia o la de la reforma de la Plaza de San Blas, que se encarrilaba hacia una nueva licitación hace más de un año. Con el anterior Consell del Botànic, en 2022, la Generalitat Valenciana tuvo que rescindir el contrato con la empresa para rehabilitar dos bloques del barrio de Miguel Hernández en la ciudad alicantina.
En septiembre de 2023, según comunicaba la propia Ecisa, se alcanzaba un acuerdo con el fondo británico Voyager Investing para cancelar una deuda de 15 millones con la entrega de una urbanización en Almería para aligerar su carga financiera. Esta operación se enmarcaba en el programa de reducción del endeudamiento puesto en marcha por Urbas y que permitirá la cancelación estos 15 millones de euros de deuda. En estos momentos, la empresa está en su fase de comunicación y negociación con acreedores.
