ELCHE. ‘México Fronterizo, acercamiento desde el fotoperiodismo’. Así se titula la exposición que lleva instalada en la Univesidad Miguel Hernández desde el pasado mes de marzo. Una exposición con una treintena de fotos del fotoperiodista José Pedro Martínez (Santa Pola), que estudió en Atzavares (otro más), la facultad de periodismo de la universidad, y que se ha centrado en esas miradas que nos quedan bastante lejos en los informativos y que sólo llegan por goteo en determinados medios. Está afincado en México y con esta exposición muestra una mirada crítica hacia las políticas migratorias de EEUU y a la situación social que viven muchos de los migrantes que intentan llegar al país norteamericano en búsqueda de un nuevo futuro. Esto le ha llevado a ser portada de medios prestigiosos como el Newsweek.
¿De qué va México fronterizo?
Son una serie de retrataos sobre los protagonistas de la historia migrante de la frontera de México. Está dividida en dos series, una de migrantes en ciudades como Tijuana, y la otra sobre la montaña de Guerrero, uno de los lugares donde hay más migrantes. Las fotografías muestran la variedad de sus perfiles y la gran confluencia migratoria que existe, pues hay de todo. Allí te puedes encontrar gente de Centroamérica, de estados de México y gente que está deportada desde la era Obama. La frontera fue durante un tiempo un lugar fácil de pasar clandestinamente y ahora está muy fortificada con cámaras de seguridad, infrarrojos, vigilantes de seguridad…
Entre 2016 y 2017, llegaron más de 20.000 migrantes de origen haitiano provenientes desde Brasil, país al que habían ido tras el terremoto de 2010. Los acogió Brasil y muchos fueron mano de obra para la construcción de las obras del Mundial. Pero con el cambio de gobierno, muchos haitianos emigraron a EEUU, que tenía un compromiso con ellos para cuando lleagran a la frontera de México, pero cambiaron de decisión a finales de la era Obama y principios de la era Trump. Veías que como Tijuana estaban llenísimas.
¿Qué importancia crees que tiene esta exposición y el del fotoperiodismo que tú practicas en general?
Para mí la importancia del fotoperiodismo es que se hable un poco más de México en España. 2017 ha sido el año más violento desde 2011 (casi 60.000 homicidios). La guerra del narco empezó en 2006 cuando el presidente Felipe Calderón sacó al ejército a la calle. Entonces nacieron cárteles muy fuertes como el de los Zetas. Empezó una ola de secuestros y extorsiones y este año se ha vuelto a disparar. Es importante que se hable de México porque es la 11ª economía mundial, el país más grande de habla hispana. Es rico en muchísimas cosas y sin embargo vive una crisis de Derechos Humanos. Desde 2006 ha habido 150.000 muertos y más de 30.000 desaparecidos. En Veracruz por ejemplo estaban los Zetas. Allí empezaron a encontrar fosas clandestinas con más de 14000 restos de 300 personas. Uno de los 32 estados del país.
Es curioso que por numerosas organizaciones no se considere que México sea un país en guerra a pesar de los datos que mencionas…
Está una mala consideración decir que no está en guerra. Te puedo hablar por ejemplo de los Guachicoleros en Puebla, pueblos enteros de campesinos que se han volcado en extraer el petróleo de los oleoductos para venderlo. Los cárteles les han armado y se han enfrentado al ejército, les proporcionan la infraestructura. Además los propios narcos están infiltrados en la empresa CEMEX y entre los militares. Antes, Puebla era un lugar pacífico y precioso, ahora lleva dos semanas con helicópteros sobrevolando y llenísimo de militares. Ahora hay pueblos enteros que son guachicoleros. Y todo esto sin nombrar a grupos como los paramilitares e incluso los sindicatos van armados.
¿Cómo haces para moverte en estos ambientes? Te juegas el pellejo literalmente.
No hay foto o reportaje que merezca la vida. Tengo un protocolo de seguridad con otros periodistas que están aquí. Estoy formado en seguridad y en cuanto huelo el problema vuelo. Aquí hay pueblos donde llegas y te corren a balazos.
¿Por qué y cuándo decides ir a México? ¿Cómo es la vida allí como fotoperiodista?
Llegué en 2011 con la Beca Destino. Siempre me había atraído México. Es un país de contraste, tiene lo mejor y lo peor. Hay gente encantadora y es un país precioso, hay comida increíble, y su naturaleza te deja sin palabras. He visto pirámides, volcanes en erupción o jaguares en libertad. Como periodista me sigue llamando. El trabajo documental de los migrantes es más extenso, pero he tocado otros temas, como el de pasados neandertales o indígenas. No es fácil vivir a nivel económico, pero en cuanto a temas lo tiene todo. Suelo compaginar el trabajo con fotografía de evento, bodas y fiestas de quinceañeras. Y paralelamente voy hacia publicaciones que te pagan mejor.
¿En qué medios has publicado o publicas?
Colaboro con eldiario.es, no me da para cubrir lo que me cuesta, pero es un medio comprometido en España y ayuda a que se conozca en México lo que ocurre. Cuando necesito dinero voy a Telesur, Al Jazzera o Newsweek. Ahora también estoy publicando en la Open Society Foundation (Soros), en Instagram, donde pagan bien por exponerme en su cuenta 20 fotos y además tengo el derecho sobre ellas para volver a exponerlas. También he trabajado como fixer con periodistas canadienses o estadounidenses, que pagan muy bien pero no en el momento
¿En qué andas inmerso ahora?
Tengo otra exposición en Puebla ahora sobre la migración. Y dentro de dos días voy a Chiapas a hacer lo propio. Ahora también estoy con un reportaje sobre los colectivos que cultivan amapola por la demanda de heroína. México es el segundo productor de opio del mundo. En verano volveré a Santa Pola para el verano y trabajaré con el servicio de hamacas mientras para hacer dinero (risas).
Por último, ¿cuál es el ambiente entre los migrantes con Trump ahora que ya lleva varios meses de gobierno?
Trump ha facultado a la policía migratoria, la de la aduana, para cambiar el trato radicalmente con los migrantes. Hay gente que viene de la violencia de Centroamérica, de Michoacán o Guerrero y los policías los devuelven a México. Están facultados para ello. Si vas a solicitar asilo deben entrevistarte y tienes derecho a que te asistan y te reciba un juez migratorio, pero te devuelven a México con una devolución en caliente. Pero la gente va a seguir migrando aunque Trump quiere obviarlo. La gente no va a dejar de migrar. Sigue habiendo desplazados por las maras, el narco o simplemente gente sin casa.