Ramírez pone fin a su etapa en el Hércules. Seis años después, Ortiz se vuelve a quedar solo

ALICANTE. Juan Carlos Ramírez pone fin a su etapa en el Hércules, deja el club blanquiazul. 

Lo hace "en diferido", es decir, garantizando (en la parte que a él le corresponde) el cumplimiento de las obligaciones económicas de la entidad hasta el 30 de junio, pero será más que complicado que lo volvamos a ver por el estadio José Rico Pérez antes de esa fecha y desde luego tras la misma.

El comunicado de este domingo, en el que la entidad blanquiazul anuncia lo anterior y "la renuncia" de Ramírez "al día a día", a su rol en la comisión deportiva, se ajusta a lo que este le adelantó a los peñistas con los que se reunió la semana pasada y que ya contamos en Alicante Plaza: que con el cierre de la ventana de fichajes de enero regresaría a la segunda línea, quedando Paco Martínez y Francisco Escudero al frente de la comisión deportiva y planificando la temporada 2020/21. Pero, si bien aparentemente la única diferencia entre lo ocurrido este domingo y lo anterior es que no ha esperado a que finalice el mercado de invierno para dejar el cargo, la realidad es de mucho mayor calado hasta el punto de que Enrique Ortiz se queda solo al frente del Hércules: en la gestión desde ya y en lo económico desde el 1 de julio.

Los motivos que llevan a Ramírez a poner fin a una etapa en el club del Rico Pérez que arrancó  al inicio del curso 2014/15, tras el descenso a Segunda División B (momento en el que el empresario todavía era patrono de la Fundación del Elche, club del que había llegado a ser vicepresidente) tienen mucho que ver con el clima de crispación que rodea a la entidad y que este domingo vivió otro de sus momento álgidos con la marcha de aficionados hasta el estadio exigiendo el fin de la era Ortiz y los cánticos durante la segunda mitad del partido y tras el mismo que apuntaban también a Ramírez, entre otros.

El empresario vasco pone fin a su etapa en el Hércules después de haber llegado a ser presidente del club durante varios meses (en sustitución de Carlos Parodi y con Quique Hernández como sucesor), además de máximo responsable de la parcela deportiva (en sustitución de Javier Portillo).

Zassh Tecnológica

Ramírez seguirá siendo socio del constructor en los otros negocios que mantienen y también en relación con el Hércules a través de Zassh Tecnológica, ya que ambos comparten el capital social de la misma a partes iguales (la administración es mancomunada y la ostenta el empresario vasco y Portillo), pero dicha mercantil apenas es titular del 26% del capital social del club blanquiazul, siendo su papel principal en relación a este  el de ser acreedor de su Fundación, que sigue siendo la máxima mayoritaria con el 68% de las acciones.

Esa condición de acreedora de la Fundación (que no olvidemos que es insolvente) la adquirió Zassh al hacerse, en diciembre de 2017 y a cambio de 608.150 euros, con la deuda que mantenía aquella con el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y que entonces ascendía a unos 15.400.000 euros: la mercantil de Ortiz y Ramírez se subrogó por el banco del Consell en el procedimiento 582/2014 de ejecución de títulos no judiciales que se sigue en el Juzgado de Primera Instancia nº 7 de Alicante, pero no instó la citada ejecución, de ahí que la mayoría accionarial del Hércules siga ostentándola la Fundación y las únicas acciones de la entidad blanquiazul que posee Ramírez (y Ortiz a través de Zassh) sean las que llegaron a sus manos en la citada operación con el IVF (este era titular de un paquete que originariamente era de Aligestión y que entonces representaba el 15% del capital social del club) y las que obtuvo los dos ejercicios siguientes tras aceptar sendos canjes de deuda del Hércules con Medimotors y otras mercantiles de Ortiz.