ALICANTE. El grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Alicante ha presentado una batería de alegaciones con el objetivo de "paralizar la construcción de la macroplanta de abonos y escombros proyectada en Fontcalent". Portavoces del partido han señalado que la empresa promotora, Abornasa, ha reactivado el proyecto y ha solicitado a la Generalitat Valenciana que impulse los trámites para su ejecución. Los socialistas aseguran que "la propuesta enviada al gobierno de Carlos Mazón no cuenta con las garantías medioambientales suficientes y, además, se sitúa en una zona con alto riesgo de inundación, saturada de residuos y de plantas de desechos".
"Exigimos al alcalde que convoque cuanto antes la Comisión de Fontcalent. Necesitamos abordar con urgencia la vulnerabilidad del valle, que ya está saturado por industrias de vertidos. No se entendería que el informe de compatibilidad urbanística municipal no fuera negativo. Barcala debe comprometerse con los vecinos y vecinas, posicionándose en contra del proyecto, en lugar de alinearse con intereses privados, obviando la participación en dicha comisión que se constituyó a propuesta del grupo socialista", ha destacado la portavoz, Ana Barceló.
El proyecto para construir esta macroplanta "lleva dos décadas estancado y sin los permisos necesarios debido a sus problemas de adaptación a la regulación medioambiental y por la oposición frontal de los residentes de Fontcalent", según apunta el comunicado del PSOE. En esta línea, el edil socialista Raúl Ruiz ha cargado contra la Generalitat Valenciana "por haber accedido a publicar el proyecto para aprobar la autorización ambiental integrada sin recibir la documentación necesaria, según establece la normativa". Al tiempo, ha puesto en duda "que una instalación de estas dimensiones pueda ubicarse en Fontcalent sin causar un impacto medioambiental inasumible, teniendo en cuenta la concentración existente de este tipo de industrias en la zona".
En total, el PSOE ha efectuado 17 alegaciones que abordan "las numerosas deficiencias de este proyecto, que no prevé cumplir los límites de ruido previstos en la ley, mantiene carencias importantes en la gestión de residuos, aporta una declaración de interés comunitario (DIC) caducada y requiere de una nueva evaluación del impacto ambiental (DIA) tras sufrir cambios sustanciales como el desistimiento de implantar un vaso de vertido. Además, el proyecto no incluye ningún plan de emergencias pese a afectar a una zona de alto riesgo de inundación, tratar con fertilizantes inestables e incluir un depósito de hasta 1.500 litros de gasoil para abastecer la maquinaria móvil", añade la nota pública.
"La documentación que ha presentado Abornasa para solicitar la Autorización Ambiental Integrada no estará completa mientras no aporten el informe de compatibilidad urbanística que autorice allí esa industria, como exige la Ley, igual que el informe de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Este proyecto no da respuesta a todos los condicionantes ambientales que tienen unas instalaciones de este tipo en esas parcelas y, además, el Plan de Actuación Territorial destaca su alto riesgo de inundación", ha explicado Ruiz.
Esta macrofábrica de abonos y planta de tratamiento de escombros (RCDs) ocuparía más de 320.000 m² de extensión y contempla la recepción de 718 toneladas diarias de escombros y 96 toneladas diarias de residuos orgánicos. En total, más de 800 toneladas de residuos diarias que, según los socialistas, de las que, según sostienen, en el proyecto no se identifica "ni su procedencia ni tampoco indica a dónde llevarán el rechazo final, tras desistir en esta nueva solicitud de disponer allí de un vertedero de rechazos. Un volumen de rechazo que, en el caso de los RCDs, continúa superando en más de un 25% el máximo permitido en el Plan Integral de Residuos de la Comunidad Valenciana. Es decir, mientras la planta pretende preparar para recuperación o reciclaje un 48,8% de los residuos de construcción y demolición obtenidos, la obligación establecida en el PIRCV es de alcanzar un 75% con efecto inmediato".
Ruiz ha defendido que "el proyecto no cuenta con las garantías medioambientales suficientes y cabe destacar que se sitúa en una zona altamente vulnerable, saturada de residuos y de plantas de gestión de esos residuos. En el escrito registrado se alega que el documento del PATRICOVA considera de alto riesgo de inundación la ubicación propuesta, con hasta cinco pasos de evacuación, y prohíbe allí explícitamente esta actividad. Cabe recordar que el Ayuntamiento llegó a expedientar en 2018 a la empresa por llevar a cabo los movimientos de tierra preparatorios del proyecto sin las autorizaciones y permisos necesarios", recalca el comunicado.
La macroplanta se pretende ubicar a menos de 1.000 metros de la microrreserva de flora de Fontcalent y apenas a 300 metros del núcleo consolidado de viviendas de la zona, según el grupo municipal. El PSOE se ha reunido con representantes de la asociación de vecinos El Salar de Fontcalent para darles a conocer las enmiendas presentadas. Su presidente, Agustín Pérez González, asegura que "la planta de Abornasa supone un daño irreparable para una zona que está cansada de ser el vertedero de Alicante".
"Sufrimos la cementera, las canteras en la sierra, el vertedero municipal y varios vertederos de escombros. Este proyecto es una gota enorme para un vaso que ya estaba lleno porque en el valle de Fontcalent tenemos una microrreserva de flora y unos pasos de rambla que no se están teniendo en cuenta para ubicar industrias de este tamaño. Los vecinos también estábamos aquí antes, no tenemos porqué convivir con plantas de fertilizantes que han causado desgracias en otros sitios ni con más plantas para moler escombros y generar más polvo del que ya sufrimos por todas estas industrias. Por eso pediremos que nos permitan intervenir en la próxima Junta de Distrito del día 16 para pedirle al Ayuntamiento que no otorgue ningún informe positivo de compatibilidad urbanística", ha señalado.
El Salar de Fontcalent presentó más de 600 firmas cuando en 2015 Abornasa planteó este proyecto y ha registrado nuevamente estas firmas para que la Concejalía de Urbanismo actúe a favor del interés de los residentes. Por su parte, el PSOE ha anunciado su respaldo a este planteamiento en la Junta de Distrito y ha exigido la convocatoria urgente de la Comisión de Fontcalent para aprobar un plan de trabajo que incluya soluciones a la saturación de estas industrias en la zona y el compromiso de no incorporar otras nuevas, como solicita Abornasa.