Reunión entre Bascuñana y el conseller de Economía Sostenible. Foto: APORIHUELA. Desde el área de Comercio e Industria del Ayuntamiento de Orihuela se está trabajando en un proyecto para la creación de un parque industrial, en un término municipal que sufre la carencia del suelo consolidado para esta actividad más allá del poligono industrial Puente Alto, que quedó en evidencia la viabilidad de su ubicación con las inundaciones de septiembre de 2019. Este nuevo proyecto cuenta con el apoyo y visto bueno de la Conselleria de Economía Sostenible.
A preguntas de este diario al edil de Industria, Víctor Bernabéu, no ha querido desvelar la ubicación de este parque empresarial, delegando esa información al momento de la presentación, prevista para dentro un mes. Aunque ha declinado confirmarlo, a menos que se haya dado un giro radical y atendiendo a los últimos movimientos desde Urbanismo, todo apunta a que se va a ubicar al otro lado de la línea ferroviaria, en el espacio catalogado como Zona 12. Como publicó este diario, en julio de 2020, el Ayuntamiento de Orihuela inició el proceso para la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Esta zona comprende una franja al otra lado de las vías del tren, en el tramo de la avenida del Marqués de Molinsy la avenida de la Estación y linda con la carretera a la pedanía de Hurchillo y Arneva, y la CV-95, CV-921 y CV-925.
En el proyecto para la modificación puntual de esta zona se le otorgaba como uso dominante a lo catalogado como "industrias blandas". Entre esta clasificación se encuentran los institutos tecnológicos, empresas de investigación e innovación, centros de investigación y desarrollo biomédico, procesos informáticos, investigaciones del sector agropecuario y espacios para la generación y desarrollo de I+D. También añadía, como usos compatibles, al hotelero, comercial, social, sanitario, cultural, asistencial, deportivo, entre otros.
Área de modificación parcial del PGOU de la Zona 12 en Orihuela. Foto: APLos requisitos para la edificación establecía en el proyecto de la modificacion urbanística, una parcela mínima de 2.500 m2 con una área mínima de 50 metros respecto a la vía del tren y una altura máxima de 10 metros.
Ayer, el conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafael Climent se reunió con el regidor oriolano, Emilio Bascuñana, y los ediles de Industria, Víctro Bernabéu y el de Agricultura y Empreo, Víctor Valverde para presentarle el proyecto. "Para que los pasos que vamos dando tengan una solidez y firmeza adecuada. Agradezco su actitud colaboradora con Orihuela, y su pronta respuesta viniendo a escuchar nuestro planteamiento, dándonos todo su apoyo en lo que respecta a sus competencias. Espero que este proyecto pueda ver la luz lo antes posible" señalaba Bascuñana. Climent ha calificado el proyecto de "muy beneficioso" y ha trasladado todo su apoyo a esta iniciativa.
Una iniciativa que todavía precisa de la valoración e informes sectoriales que den el visto bueno para ejecutarlo. Aunque el primer edil también ha rehusado dar más detalles, sus palabras sobre la idoneidad de este parque industrial coinciden de forma implícita con el documento justificativo de la modificación del PGOU de esta zona. En él se esgrimía que se abriría una oportunidad para "dinamizar y regenerar esta zona". También que "reúne una absoluta conexión con el casco urbano y su magnífica accesibilidad" y "puede ser una opción extraordinaria de dinamización del comercio, los servicios y la renovación urbana de una zona fundamental en Orihuela".
Desde principios de los 2000 Orihuela viene buscando las herramientas para ampliar su zona industrial, con la homologación y el Plan Parcial del Sector "El Escorratel", PAU 16 y PAU 17. A principio del año pasado el Servicio Territorial de Urbanismo de la Generalitat desechaba todas esperanzas del Ayuntamiento al denegar la aprobación definitiva del que iba a ser la ampliación del Polígono Industrial Puente Alto. Aunque en ese momento se diera la conclusión final, desde su tramitación viene recibiendo informes desfavorables, la mayoría sobre el riesgo de inundación. Así se evidenció con la dana de 2019.
