Orihuela se queda sin el plan de ampliación del polígono y sin alternativas a corto plazo

ORIHUELA. 20 años desde que se dieran los primeros pasos, la Homologación y el Plan Parcial del sector "El Escorratel", PAU 16 y 17, ya se conoce el deselance. El grupo municipal socialista de Orihuela ha desvelado que el Servicicio Territorial de Urbanismo de la Generalitat Valenciana ha determinado denegar la aprobación definitiva de lo que iba a ser la ampliación del Polígono Industrial Puente Alto. Este escenario deja a Orihuela sin alternativas al menos a corto plazo.

Los informes desfavorables en cuanto a la idoneidad de la aprobación de este plan parcial urbanístico vienen dándose casi desde su nacimiento. La mayoría se centraban en el alto riesgo de inundación que supone la zona elegida, junto al actual polígono. Y así quedó latente ante la DANA de septiembre. El volumen de informes desfavorables también se ha manifestado en la variedad de organismos e instituciones de distinta naturaleza, como el Servicio de Ordenación del Territorio, la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Unidad de Carreteras de Alicante del Ministeriode Fomento y Comisión de Evaluación Ambiental.

En noviembre de 2018, desde el Consistorio aseguraron que este problema ya estaba resuelto "a falta de informes sectoriales" y se marcaron ese año para desbloquear la situación. Pero el desenlace ha sido bien distinto. "Nos hemos quedado sin alternativa al haberlo supeditado todo a este plan", afirma Carolina  Gracia, portavoz del grupo municipal socialista. Este plan parcial nació y se desarrolló a instanciass de promotores privados. Fue durante el gobierno municipal del PSOE y Los Verdes, cuando se planteó, a través de su responsable, Antonia Moreno, tomar la iniciativa desde el consistorio de llevar a cabo el nuevo polígono industrial proponiendo para ello una nueva zona dentro de un plan estratégico de la Generalitat, que consistía en trasplantar la zona industrial al otro lado de la autovía para sacarla de la zona de la rambla de Abanilla, como ha recordado Gracia. 

Hace justo un año, el Ayuntamiento de Orihuela, otorgaba la cesión de condición de urbanizador a las firmas Marcos y Bañuls y Samaguil para el desarrollo de tres unidades del sector PAU 16 y 17 en El Escorratel. Se trataba de un acuerdo provisional en el que las firmas tenían que presentar aval bancario y la autorización del Consell. Un año después de ese momento, dos décadas de trámites dejan a Orihuela sin uno de sus proyectos más esperados. José Aix, concejal de Urbanismo, ha afirmado que "estaba previsto que sucediera esto y saliera adelante por la cuestión de la inundabilidad".

En el pleno de octubre, el grupo socialista llevó una moción en la que instaban al bipartito formado por PP y Ciudadanos, que rescataran la iniciativa de hace dos legislaturas. Pero votaron a en contra. Aix ha explicado que el voto fue en contra porque "fue absolutamente oportunista y además en su esbozo de un plan general, que finalmente quedó paralizado y no aportaba nada nuevo". Gracia ha recordado esa votación en contra. "Lo hicieron con  argumentos vacíos como que toda Orihuela era inundable, no sólo desprecian el trabajo de la oposición sino que con este  tipo de argumentos se ríen de todos los empresarios que en septiembre sufrieron en sus negocios los efectos de la DANA". 

El concejal de Urbanismo, Jose Aix (Cs), ha manifestado también sus próximos propósitos: "Tenemos otras urgencias pero lo que queremos hacer es micropolígonos en pedanías y vamos a hacer la regularización de naves industriales fuera de Ordenación, que está plagado. Estamos viendo a ver si es viable".