ALICANTE. El Grupo Marjal avanza en el proceso para reconvertir el antiguo edificio de Axa Seguros en uno de los centros de coliving más avanzados del territorio nacional, en el que se combinarán espacios para el alojamiento y el trabajo, como adelantó Alicante Plaza al informar sobre el acuerdo de adquisición del inmueble, el pasado mes de diciembre. La compañía acaba de solicitar licencia de obra para iniciar la transformación del inmueble, de más de 2.500 metros cuadrados distribuidos en 7 plantas, acogiéndose al mecanismo de tramitación exprés habilitado por el Ayuntamiento de Alicante para los llamados proyectos prioritarios. Se trata de una fórmula prevista para aquellas iniciativas que acrediten la generación de puestos de trabajo en la ciudad, que se aprobó el pasado 7 de abril, con la intención de anticipar una de las nuevas posibilidades incorporadas en la actualización de la ordenanza de concesión de licencias para reducir los plazos de resolución de permisos en aquellos proyectos que aporten un valor añadido al interés público.
Entre ellos, figurarían los enfocadas en el desarrollo tecnológico y la innovación o la conservación del patrimonio histórico; los que supongan la generación de diez o más puestos de trabajo con contrato indefinido; los que impliquen una inversión en activos fijos (excluyendo los inmobiliarios) de 600.000 euros; o los que conlleven un presupuesto de ejecución material superior a un millón de euros.
A priori, la propuesta del Grupo Marjal cumple con varios de esos requisitos. El más evidente, al margen de la generación de puestos de trabajo, es el de la inversión: fuentes de la compañía consultadas precisaron que se contempla un desembolso de 6 millones para acometer la reconversión del céntrico edificio, situado en la Avenida Alfonso El Sabio, en el primer proyecto de coliving del centro de Alicante. Con todo, la solicitud de licencia queda sujeta todavía a la evaluación que corresponde efectuar a los técnicos de la Agencia de Desarrollo Local para certificar que se cumple con las condiciones requeridas para que pueda considerarse proyecto prioritario.
La compañía pretende que este primer 'coliving' en el centro de Alicante se convierta en el modelo a exportar a otras ciudades del territorio nacional
El diseño de la reestructuración del edificio ha sido desarrollado por los estudios de arquitectura Langarita-Navarro y Ad-hoc e incluye estrategias diferentes para los espacios exteriores e interiores. Una de las prioridades que se han contemplado en su definición ha sido la de conectar el coliving con la ciudad de Alicante, con el objetivo de que tuviera claras referencias al espacio urbano donde se asienta.
Así, el edificio estará cubierto en su exterior de una fachada vegetal que dejará los huecos de las ventanas para el paso de la luz natural. Esta cubierta se realizará "con especies de plantas autóctonas productoras de frutos rojos, la base de la alimentación de algunas aves características del monte Benacantil", según fuentes de la compañía. De este modo, el proyecto se ajusta a la filosofía de coliving expandido, que persigue el Grupo Marjal "en el sentido de que no sólo se trata de crear un lugar para vivir, sino que tiene su incidencia en el exterior, en los vecinos y transeúntes que pasean por delante", según representantes de Langarita.
El coliving de Alfonso el Sabio supone la apertura de la nueva línea de negocio del Grupo Marjal, centrada en ofrecer soluciones habitacionales adaptadas a las necesidades del siglo XXI, con la intención de que ese modelo pueda ser exportable desde Alicante hacia otras ciudades del país. De hecho, el consejero delegado de Grupo Marjal, Javier Fur, incidió, a consulta de este diario, en que "vamos a realizar una apuesta por la innovación en soluciones habitacionales de vanguardia en una ubicación emblemática de la ciudad de Alicante, con el consiguiente impacto social y económico para el entorno". Según Fur, "el objetivo es exportar este novedoso concepto residencial a otras ciudades españolas", de modo que el edificio de la antigua aseguradora pueda convertirse en referente.
Como avanzó este diario, la operación de compra del inmueble se cerró en octubre por un importe que no ha trascendido, en una operación intermediada por Vilanova Inmobiliaria. El edificio formaba parte del porfolio de Aliseda (propiedad del fondo de inversión Blackstone). Grupo Marjal, hasta ahora centrado en la promoción inmobiliaria, los resorts vacacionales y las participaciones industriales, se adentra, así, en un nuevo concepto de residencial enfocado a los viajeros de negocios que recalen en Alicante por periodos breves, atraídos por focos económicos como puedan ser la Euipo o el Distrito Digital.