Daniel Pernas: "Hay que contar algo, más allá de la técnica, porque sino eres más artesano que artista"
Daniel Pernas: "Hay que contar algo, más allá de la técnica, porque sino eres más artesano que artista"
ALICANTE. Domus, de Margarida Durá, es la obra ganadora del primer premio del certamen solidario de pintura que Sánchez Butrón Abogados ha convocado por segundo año consecutivo. Una iniciativa que arrancaba en 2019 para conmemorar el 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos con la libertad como tema principal, y que ha continuado este año, esta vez con la igualdad como eje central y con la celebración del Día de la Mujer Trabajadora como telón de fondo. Una igualdad que ha sido plasmada de muy diversas formas por los cuarenta finalistas de entre los más de cien participantes que se inscribieron en esta nueva edición.
La obra ganadora del primer premio y la pieza que obtuvo el segundo galardón —concedido a Emigración 2030, de Joaquín Ramírez—, así como el cuadro ganador del premio que entregaba la audiencia de la firma de abogados alicantina en sus redes sociales —que recayó en El nacimiento de la igualdad, de Gonzalo Guillermo Vera—, se exponen junto a los otros finalistas en una muestra que se podrá visitar hasta el 14 de marzo en la sede de la Asociación de Artistas Alicantinos. Un proyecto con el que, además de promover la pintura de los artistas plásticos de la ciudad y del país, al tiempo que se hace hincapié en la defensa de los derechos humanos de manera activa, también se busca un sentido solidario. Y es que, en esta ocasión, se han recaudado fondos para la Asociación de Paralíticos Cerebrales de Alicante (APCA).
La ganadora de esta edición, Margarida Durá, es de Petrer y se dedica al sector de la Sanidad, así que su incursión en el mundo de las artes es un puro hobby al que le dedica su tiempo por las tardes, cuando ya ha acabado su jornada laboral. "No me recuerdo, a lo largo de mi vida, sin un lápiz o algo para dibujar en la mano", afirma rotunda la autora de la obra ganadora. A partir de los veinte años empezó a introducirse en el mundo de los óleos y los acrílicos. Sin embargo, ha sido en los últimos tiempos cuando ha empezado a combinar este formato con el del collage, precisamente la técnica que ha empleado en Domus. "Es una forma de hacer cosas más conceptuales rápidamente", explica. En el año y medio en el que viene trabajando con el collage ha elaborado pocas piezas, aunque una de ellas ya le ha valido para ganar este cuantioso premio, que tiene un importe de mil euros.
"Me da mucha alegría que haya ganado con mi segunda obra en la que utilizo este tipo de materiales, como es el textil", reconoce Durá. Lo primero que se reconoce en la obra es un edificio hecho con pequeños trozos de felpa al que la autora llama "edificio social". En los huecos, que hacen de ventanas, se pueden ver varias mujeres anónimas o fragmentos de ellas. Otras ventanas están vacías y la lectura que se extrae puede ser doble. Por un lado, "esas mujeres aparecen cercenadas en sus extremidades y eso indica que se trata de mujeres artistas o artesanas si es la mano lo que se ha fragmentado, deportistas si son los pies e incluso científicas o pensadoras si se trata de la cabeza", explica la artista. Por otra parte, los huecos que aparecen en blanco dan una lectura positiva, y es el hecho de que "muchas mujeres consiguen escapar de sus ataduras".
Domus es el título de la obra, pero es también la palabra latina con la que se conoce a un tipo de casa romana. Y con esa palabra se hace referencia a los orígenes o los cimientos de la sociedad y del pensamiento, que ha llevado a las mujeres a esa situación de desventaja. En continua reversión, sí, aunque nunca parezca completarse. Así, esa casa o "edificio social" es por tanto una jaula que muestra las debilidades de una sociedad no igualitaria, marcando el ámbito doméstico como el lugar donde las mujeres han estado recluidas secularmente. Un hecho que ha conseguido que muchas mujeres hayan acabado siendo invisibilizadas tras los muros de su casa, convirtiéndose en una gran pérdida de talento para la sociedad. "Podrían haber sido grandes artistas o grandes científicas que nos hemos perdido todos", apunta Durá.
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