ALICANTE. La renovación de la oferta hostelera llevada a cabo por el aeropuerto de Alicante-Elche durante este año culminará a principios de 2020 con dos nuevas incorporaciones, que son las últimas que quedan pendientes. Por un lado, la terraza con vistas a los aviones de la terminal, que podrán utilizar los fumadores, y a la que se accederá desde la cervecería Carlsberg que ya funciona en la segunda planta, en la zona de embarque. Por otro, el restaurante italiano La Tagliatella, que abrirá en Alicante su primer establecimiento dentro de un aeropuerto.
La Tagliatella abrirá su nuevo restaurante en la planta baja de la terminal de salidas, bajo la citada cervecería, en la misma zona donde operaba el anterior restaurante antes de la renovación de la oferta. Al contrario que el pub Carlsberg, al que solo pueden acceder los pasajeros con billete una vez superado el control, La Tagliatella se encontrará en la zona de libre acceso. Este será, además, el único restaurante de la oferta hostelera del aeropuerto, al margen de los establecimientos de comida rápida y para llevar.
El que será su primer restaurante alojado en una terminal aérea en todo el mundo abrirá en Alicante-Elche de la mano de Areas, propiedad del fondo PAI Partners, que se ha adjudicado la explotación de ocho de los dieciocho locales de hostelería que sacó a licitación Aena en el quinto aeropuerto de España por tráfico. De esta forma, el aeropuerto de El Altet será el primero del mundo en contar con una Tagliatella entre su oferta de restauración. Con este nuevo establecimiento y el que construye en Vistahermosa, la cadena sumará su undécimo restaurante en la provincia.
Por otro lado, el aeropuerto contempla que la terraza para fumadores con vistas a la pista de operaciones, a la que se accederá desde el pub Carlsberg, esté terminada y lista para estrenarse a lo largo de los primeros meses del próximo año, probablemente antes de que acabe el invierno. Será la primera terraza del aeropuerto, tendrá 130 metros cuadrados y 'vistas' a la plataforma de aparcamiento de aviones y a la pista de despegue y aterrizaje.
Esta terraza servirá para que los viajeros que aguardan su vuelo puedan observar la llegada y salida de aeronaves y, previsiblemente, será especialmente apreciada por los fumadores, ya que en la zona de embarque no hay otro punto donde poder encender un cigarrillo. La apertura se enmarca dentro de la renovación de la zona de restauración y se situará sobre un edificio de pre-pasarela de embarque a varios metros de altura, lo que permitirá unas vistas con el mar Mediterráneo de fondo.