La lonja de Orihuela, con personas realizando compras. Foto: RAFA MOLINAORIHUELA. La ciudad oriolana busca revitalizar el comercio local, una actividad que en las calles se ha visto relegada con la potencia de los centros comerciales. Mientras que en 1999 Orihuela era el quinto municipio de toda la Comunitat Valenciana en comercio minorista, hoy está entre el puesto veinte y el treinta, según datos de la Cámara de Comercio de Orihuela. Una estructura que ha perdido tejido y que resta con uno envejecido.
"Es difícil competir con grandes comercios que abren a las afueras y que, sobre todo el fin de semana dirigen su público a los centros comerciales y dejan el centro vacío de clientes", asegura uno de los comerciantes en la zona centro de Orihuela. "Necesitamos más compromiso del Ayuntamiento para que no muera nuestro comercio y nuestra forma de vida y espacios".
Desde el Ayuntamiento de Orihuela se puso en marcha en abril la campaña “Conexión Premium”, una iniciativa autonómica impulsada por la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunidad Valenciana (COVACO),que a través de ACMO (Asociación de Comerciantes del Municipio de Orihuela) se lleva a cabo en el municipio.
Segúnel edil de Comercio Miguel Ángel Fernández, “Esta campaña tiene el objetivo de poner en valor el comercio local y remarcar la relación tan especial que se establece entre los comerciantes y los clientes, que son los ciudadanos de Orihuela, y que llevan incluidos la personalidad, tradiciones y la cultura propias de la localidad”.
La conexión consiste en reforzar el nexo entre los comerciantes y los clientes, apelando a la cercanía, la calidad, la confianza y la experiencia del comerciante local. Otra de las comerciantes de moda en el centro, mantiene que "necesitamos que lleguen nuevos comerciantes, nuevos operadores que refuercen la estructura y que animen a que la gente se quede en el centro para comprar y no se vaya fuera". Y añade que el consejo, experiencia y proximidad de los profesionales que llevamos años trabajando aquí no la dan las grandes multinacionales”, señala la comerciante.
El trabajo de ACMO se queda cojo si no cuenta con un contexto propicio para el resurgir del comercio local. Una de las propuestas para revitalizarlo, que llegan desde FACPYME y también desde la Cámara de Comercio es el fomento de las zonas peatonales y de un centro comercial urbano que tenga regulación equiparable a la de los centros comerciales en las afueras.
Otra de las propuestas para promover el resurgir comercial en la ciudad es la de consolidar el centro urbano como espacio único por su patrimonio cultural y un turismo urbano que crece. Restaurar los elementos patrimoniales con el fin de potenciar el espacio, rehacerlo y reforzarlo urbanísticamente.
Patrimonio sin atender en Orihuela: Más de 30 actuaciones pendientes o sin proyecto
Un municipio que lleva varios años sin actuaciones urbanísticas, necesita también un impulso para atraer gente joven con ideas, abogando por los viveros de empresas o iniciativas para fomentar a los nuevos emprendedores. La accesibilidad y la adecuación de aparcamientos sería otro de los revulsivos para hacer del centro de Orihuela un lugar con nueva vida.
Las mejoras y el cuidado del patrimonio histórico de Orihuela está en stand by, en reposo hasta que lo activen. En estos momentos hay más de 30 actuaciones concretas para rehabilitar, reparar o readaptar edificaciones, de zonas deprimidas de largo recorrido como la del casco histórico oriolano, que, o están estancadas o ni siquiera existe proyecto para ellas. Estas actuaciones vienen avaladas por, o bien, mociones en pleno aprobadas que aún están pendientes, o bien anuncios desde el equipo de Gobierno que no acaban de verse hechos realidad.
Uno de los anuncios más recientes para poner en valor el Palacio de Rubalcava, edificio histórico que trae cola para ser rehabilitado, fue una moción para inscribir el monumento como Bien de Relevancia Local, que está aún pendiente de realizarse. El edificio figura en el Catálogo del Plan Especial de Protección del casco Histórico de Orihuela aunque presenta un estado deteriorado. En una degradación progresiva, con jardines invadidos por la maleza, perdió casi todas las palmeras de sus jardines, víctimas del picudo rojo. El equipo de Gobierno envió a Fomento una propuesta de rehabilitación en la que incluía salones para bodas o un minigolf.
Lo que queda claro es que para que estas iniciativas salgan adelante y el centro se revitalice hacen falta fondos. Desde la Cámara de Comercio de Orihuela señalan que, en este sentido, la iniciativa privada lleva ventaja a la pública al respecto y que hay fondos extranjeros de los que hay que aprender a nivel de gerencias de centros de forma atractivas y que serían cruciales para un centro que crece en comercio de calidad.
