ALICANTE. El paso de la pandemia del coronavirus y las medidas restrictivas adoptadas para atajarla sigue mostrando la profundidad de la crisis económica derivada de la sanitaria en la provincia de Alicante. Según los datos difundidos este lunes por el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca), la provincia cerraba el mes de febrero, justo un año después de que se detectasen los primeros casos en España, con 106.837 beneficiarios de prestaciones por desempleo, casi un 30% más que doce meses antes.
La provincia, más expuesta al sector servicios, el peor parado, que la media nacional, ve cómo aumenta mucho más también el número de pensiones por desempleo que se están pagando un año después, como consecuencia de la destrucción de empleo asociada a la pandemia. Así, hace un año había 83.295 personas cobrando esta prestación, un dato sensiblemente inferior. El aumento en un año ha sido del 28,3%, frente al dato nacional que crece un 17,8%. Es decir, el incremento en Alicante es de diez puntos más que la media.
Con estos datos, Alicante además se convierte en la séptima provincia de España donde más prestaciones por desempleo se pagan en términos absolutos (es la quinta por población), según destaca Ineca. Solo la superan Madrid, Barcelona, Sevilla, Valencia, las Islas Baleares y Málaga. El peso de la provincia en el total de prestaciones que se pagan en España aumenta hasta el 4,5%, cuando un año antes suponía el 4,2%. Es decir, casi una de cada veinte prestaciones por desempleo se pagan en la provincia.
