La hostelería de Alicante acoge el pasaporte covid entre la incertidumbre y el temor a las multas

ALICANTE. El requisito del certificado de vacunación o pasaporte covid para acceder a bares, restaurantes y locales de ocio con aforo superior a 50 personas, que entra en vigor a partir de las 24:00 horas de este viernes, día 3, multiplica la incertidumbre entre el sector hostelero de la provincia de Alicante. Como mínimo, los representantes de tres de las principales agrupaciones empresariales de la ciudad y de la provincia de Alicante -César Anca, de la Asociación de Restaurantes de Alicante (ARA); María del Mar Valera, de la Federación Provincial de Empresarios de la Hostelería de Alicante (Fepha), y Javier Galdeano, de la Asociación de Locales de Ocio y Restauración de Alicante (Alroa)- admitieron este jueves sus dudas sobre cómo debía aplicarse ese nuevo requisito en los establecimientos en determinadas situaciones. Entre ellas, supuestos como el hipotético rechazo de los clientes a mostrar su certificado o el desconocimiento de ese requisito, en el caso de turistas procedentes de otras autonomías o de otros países que no estuviesen informados de la implantación de la medida.

"Estamos a las puertas de un largo puente de diciembre en el que, ya este fin de semana, esperamos la llegada de muchos visitantes de fuera y no sabemos cómo puede reaccionar alguien que venga de Cuenca o de Madrid al que se le pida el certificado y no lo tenga", explicó Anca. "¿Qué hacemos en esos casos?", se cuestionó. "Lo lógico es que la mayoría de los ciudadanos adopte una postura responsable y no haya problemas, pero, si alguien se niega a mostrar ese certificado, ¿cómo actuamos si no somos autoridad?", se preguntó, por su parte, Valera.

En parecidos términos se expresó Galdeano, al vaticinar que "tendremos que hacer de policías". Así, además de reprochar el retraso en la implantación de una medida "que nosotros planteamos cuando se inició la vacunación como fórmula de estímulo en un momento que podía dar mayor resultado", y de lamentar que se vuelva a aplicar sobre la hostelería, dejando fuera otros sectores, aventuró que podrían plantearse "conflictos" en el caso de que los clientes se negasen a mostrar ese pasaporte covid o el DNI a las puertas de los locales.

Las mismas incógnitas surgen por lo que respecta al funcionamiento de la aplicación 'covid check' escogida por la Conselleria de Sanidad para que los establecimientos puedan comprobar la autenticidad de dichos certificados de vacunación. "No sabemos si esa plataforma va a funcionar con eficacia o si puede quedar colapsada en algún momento", apuntó Valera. "¿Hasta cuánto tiempo podemos hacer esperar a la gente antes de acceder a que entren en el local si esa aplicación no funciona?", se planteó. 

ARA y Fepha expresan dudas sobre la implantación sobre visitantes procedentes de otras autonomías o de otros países que no estén informados sobre el requisito y auguran posibles fallos en la aplicación para comprobar la veracidad de los certificados

En este sentido, Valera también expresó el temor que ya había detectado entre los asociados por la aplicación de sanciones en caso de incumplimientos en el requerimiento del certificado. Se trata de multas que podrían oscilar entre los 600 y los 30.000 euros, según avanzaron este jueves fuentes de la Generalitat. "Viniendo de la situación de la que venimos, solo nos falta que encima nos penalicen cuando hemos mostrado nuestra predisposición a colaborar en la implantación de este requisito", incidió. 

A ello se añadiría, además, la necesidad de destinar a parte del personal en plantilla en cada negocio para que se ocupe de comprobar esos certificados. "La mayoría de los asociados ha optado por recurrir a sus empleados, que tendrán que dejar de dedicarse a sus tareas habituales, sin contratar a nadie más, porque no pueden permitírselo", incidió. 

Galdeano añadió, por último, la contradicción que, a su juicio, supone el hecho de que no se pueda reclamar a los trabajadores de los establecimientos la obligación de estar vacunados "cuando son los que estarán exigiendo que los clientes los muestren". "Va a haber más de un conflicto y más de dos, porque ya hemos visto movimientos en redes sociales de gente que considera que pedir el certificado covid es anticonstitucional", apuntó.

No obstante, como mínimo los tres coincidieron en que no se ha percibido un efecto negativo en forma de cancelaciones por la implantación del pasaporte covid. Tampoco por lo que respecta al incremento de contagios registrado a lo largo de las dos últimas semanas. "Lo cierto es que el nivel de reservas continúa yendo bien; de hecho, hemos notado una mayor antelación que otros años", señaló Anca. "Afortunadamente todo sigue igual, salvo algún caso puntual", recalcó Valera.