Diálogos AP | Mercado inmobiliario y turismo residencial (Fotos: Pepe Olivares)
Diálogos AP | Mercado inmobiliario y turismo residencial (Fotos: Pepe Olivares)
Fotos: Pepe Olivares
ALICANTE. El foro de diálogo de Alicante Plaza volvió a reunir una vez más a algunos de los más destacados protagonistas del sector inmobiliario en la provincia para debatir sobre los retos y desafíos a los que se enfrenta el tejido empresarial e institucional. Así, el ya clásico encuentro organizado por el diario contó con la participación de Valentina Sileike, directora de Lucas Fox Alicante; Rafael Moreno, socio fundador de Inur Abogados; Jesualdo Ros, secretario general de la asociación de promotoras Provia; José Antonio Izquierdo, director general de Alibuilding; y Carlos Pérez Carramiñana, profesor de la Escuela de Arquitectura de la UA.
La cita, que se celebró este jueves en el centro de negocios Regus-Business World Alicante, estuvo presentado por Miquel González, director del diario, y moderada por David Martínez, redactor jefe y responsable de la sección Plaza Inmobiliaria. Un evento que arrojó ideas claras sobre la situación actual, sobre la que se mostraron optimistas los intervinientes, y que sirvió para aportar los elementos necesarios para afrontar un futuro con mayor profesionalización.
“En el volumen general de compraventas, hemos vuelto a los niveles de 2008, con unos datos espectaculares el año pasado”, afirmaba Jesualdo Ros para poner en situación. Sin embargo, se trata de operaciones de vivienda usada, no de primera mano, que sigue sin recuperarse. Si en el pasado se repartían la cuota al 50%, en estos momentos el balance es de un 80% para la vivienda de segunda mano y el 20% restante para la obra nueva. Unos datos que, según prevé, en 2023 se verán resentidos ligeramente por la subida de tipos de interés. Un escenario en el que la demanda extranjera y la nacional para segunda residencia se posicionan como los principales sostenedores del sistema.
Pero también destacó algunos puntos débiles, principalmente la falta de stock técnico, debido a la escasez de suelo por las políticas públicas de ordenación urbana, así como la ya enquistada gestión de las licencias de obra. Aspectos que afectan a los precios al llevar a las promotoras a refugiarse en el suelo privado, que es el más caro. Situación que se ve agravada por la subida del coste de los materiales por la inflación. “Falta vivienda asequible para jóvenes y rentas medias, y vamos a seguir teniendo dificultad”, preveía el secretario general de Provia.
“Falta suelo finalista por las políticas públicas de ordenación urbana”, apuntaba Rafael Moreno. Una situación que empuja al cliente hacia el alquiler. “No hay vivienda de protección pública, pero parece que se vuelve a apostar por ella”, comentaba socio de Inur Abogados, que además ve en las normativas numerosos elementos que abordar. “Hay un serio problema con el grado de edificabilidad que supedita el diseño de las casas”, afirma. Por ejemplo, a la hora de abordar los cerramientos de terrazas o la instalación de pérgolas, lo que condiciona el estilo de vida. “Es un concepto que no se entiende; la realidad está yendo por delante del derecho”, sentencia.
En ese contexto, la vivienda de lujo se vuelve un ‘valor refugio’ para los inversores. Un ámbito en el que “Alicante tiene mucho potencial”, según afirmaba Valentina Sileike, ya que el precio está en niveles “moderados” en la provincia, comparándose con otros territorios de la costa del Mediterráneo. “La gama alta de Alicante sigue más asequible que en Mallorca o Marbella”, explicaba, al tiempo que daba un dato, y es que el 44% de las compraventas se realizan a clientes extranjeros que, además, no sufren la inflación y lo que quieren es pasar cada vez más tiempo en la vivienda. Ya no es solo algo vacacional y se preocupan por la calidad. “Ven un lugar de residencia, por lo que buscan calidad, comunidad, servicios, transporte… y todo eso lo tiene Alicante”, sentencia la directora de Lucas Fox Alicante.
Diálogos AP | Mercado inmobiliario y turismo residencial (Fotos: Pepe Olivares)
Fotos: Pepe Olivares
El perfil del cliente extranjero está reduciendo su target desde los 60 a los 55 años y, además, busca pasar más tiempo en la vivienda. Con todo, a pesar de que se perciben nuevos mercados extranjeros de nacionalidad polaca, sueca o países limítrofes con la guerra en Ucrania, Jesualdo Ros apuntaba al cliente norteamericano como un ámbito de crecimiento. “Tiene posibilidades; ya hay más de 10.000 estadounidenses residiendo en Alicante”, afirma Ros. Mientras que Rafael Moreno ponía además el foco en otro tipo de clientes: nómadas digitales. “Hay que tomar una decisión política y adaptar la normativa para buscar el equilibrio y la certeza jurídica”, asegura.
José Antonio Izquierdo destacaba la importancia de mejorar el actual parque de vivienda de España, que considera antiguo, y la necesidad de ganar eficiencia energética. “El comprador extranjero es muy exigente, pero el nacional también lo es, y por eso las nuevas promociones están incorporando aerotermia geotermia, placas solares, y fuertes aislamientos”, describía. Elementos que, según Carlos Pérez Carramiñana, se recurre a ellos “porque las normativas impiden otra forma de enfocar el problema para buscar la solución”, refiriéndose al ámbito de la arquitectura. “Se nos imponen unos requisitos del estilo arquitectónico del norte de Europa que nos obliga a abandonar nuestro estilo de vida; hay que amoldar la arquitectura al cambio climático y, sobre todo, al clima de aquí, pero las limitaciones técnicas de las administraciones no lo permiten”, sentenciaba.