IBI. El Ayuntamiento de Ibi está avanzando hacia la normalidad económica, tras la situación de endeudamiento y parálisis heredada de la pasada legislalatura, y entre las cuestiones que indican esta mejora está el hecho de que se trabaja para tener un nuevo presupuesto municipal en 2025, que será el primero desde 2022, que se viene prorrogando. Así lo ha avanzado el alcalde de Ibi, Sergio Carrasco, en el transcurso de una rueda de prensa en la que se ha hablado sobre la situación pasada y presente. Apuntó que se han creado las líneas fundamentales del presupuesto 2024, que serán la base de los presupuestos 2025 que están ultimando para que estén en tiempo y forma.
Según ha apuntado, el ejercicio de 2022 no se podía cerrar con la situación existente y se estaba trabajando en 2023 con presupuestos prorrogados, lo que dificultaba mucho la labor, ya que la ley solo permite pagar las nóminas y los gastos corrientes, pero no inversiones, ni contratos, ni convenios, ni servicios. Por esta razón, se perdieron muchas de las subvenciones que se tenían adjudicadas como, por ejemplo, la de la Plaza de la Iglesia. Además, ha explicado que estaban pendientes de pago todas las subvenciones a clubes y entidades, excepto a dos, lo que provocó que la mayoría estuvieran ahogadas y en una situación límite, y a día de hoy, la gran mayoría de asociaciones ya ha recibido la subvención de 2024 y las que faltan la cobrarán antes de final de año, como también se está planificando la compensación de las ayudas perdidas en 2023 durante 2025 y 2026.
El alcalde de Ibi, Sergio Carrasco, ha comparecido a mediodía de este jueves acompañado por la interventora municipal, Andrea Rodero, y por los tenientes de alcalde David Rojas, responsable del área de Hacienda y Contratación, y Lara Ayala, repasando lo vivido desde que tomó posesión la nueva Corporación Municipal formada por un equipo de gobierno en coalición entre PSOE y Som Ibi-Compromís. La interventora municipal ha expuesto de forma técnica los datos relativos a los años 2022, 2023 y 2024, explicando la situación económica que encontró cuando en marzo de 2024 tomó posesión de su cargo en el Ayuntamiento de Ibi como interventora habilitada nacional, en compatibilidad con la secretaría de Alfàs del Pi.
La interventora ha explicado que las cuentas de 2022 no estaban cerradas, faltando por pagar más de siete millones de euros, además de que no se estaba realizando la respectiva información de esas cuentas que requiere el Ministerio, obligaciones trimestrales que hay que notificar. Hoy en día, ese año está contabilizado, cerrado y liquidado y apuntó que se puede decir que los objetivos para 2022 están cumplidos, remitiendo toda la información al Tribunal de Cuentas y a falta de su aprobación en Pleno. Igualmente, las cuentas de 2023 no se encontraban contabilizadas y ahora mismo se encuentran en un 70% de contabilización de esos gastos, con sus respectivos informes, y ha apuntado que respecto a 2024, el Ayuntamiento de Ibi puede decir que está puesto al día en cuanto a la contabilización del gasto, también en su información y con los objetivos que requiere el Ministerio.
Además, se ha informado de que la interventora municipal y la tesorera han iniciado un Plan de Riesgos Psicosociales, debido a la situación de bajas de personal que se encontraron a su llegada, y que ha requerido de un diagnóstico del personal del área de recursos económicos, en concreto, para identificar en dónde poner el foco y las acciones concretas que se puedan llevar a cabo tanto a nivel preventivo como correctivo. Se han identificado factores de riesgo como la falta de liderazgo, la no definición de funciones, los plazos… y diversos factores que perjudicaban el buen funcionamiento del departamento. Los trabajadores han realizado un test que pueda identificar todos esos factores y con esa información se llevarán a cabo las acciones necesarias, que en un futuro se podrán trasladar al resto de departamentos.
Pagos por más de 10 millones
Carrasco se ha mostrado tajante al recordar que “nos encontramos un ayuntamiento totalmente bloqueado y con el ejercicio 2022 por cerrar. Con una deuda que ascendía a más de siete millones de euros y con más de 2.000 facturas por pagar”. Ha agradecido "la paciencia y comprensión de la mayoría de los ciudadanos ibenses, clubes, asociaciones y trabajadores municipales, que han sabido entender la situación y la dificultad para revertirla".
Según ha recordado, “se debían todas las obras realizadas, como la Plaza de la Iglesia, la pista cubierta del polideportivo, el spa de la piscina, los últimos bloques de nichos construidos en el cementerio. Obras que, en muchas ocasiones, no tenían crédito". Por otro lado, exponía que llegaron a encontrarse con un aviso de Iberdrola, "que amenazaba con dejar sin suministro de luz a Ibi si no pagábamos los 600.000 euros que el anterior gobierno había dejado a deber, caso que se repitió en más ocasiones llegando al límite de no poder poner gasolina a los vehículos municipales, ni disponer de material para hacer obras o para el trabajo diario de la brigada de obras, a lo que se sumó que los proveedores ya no servían al Ayuntamiento por los impagos”.
La estrategia que se tomó con carácter prioritario, según el alcalde, fue la de recuperar la plantilla de recursos humanos y del departamento económico para poder empezar a solucionar el resto de problemas, pues son los que dotan a las áreas de personal y pueden pagar.
El primer edil afirmaba que a día de hoy, aunque aún no se ha recuperado la plena normalidad, "estaremos en un 50%. Se han dado pasos de gigante y detallaba que se ha recuperado el personal de las áreas clave y seguimos con los procedimientos para dotar de personal suficiente a todos los departamentos, se ha contabilizado la deuda y se ha decretado el cierre del ejercicio contable 2022, habiéndose pagado más de 10 millones de deuda de este Ayuntamiento".
Junto a ello, ha apuntado que se ha saldado la deuda de obras que estaban pendientes, como la del cementerio y pronto se pagarán las de la pista cubierta o las de la Plaza de la Iglesia, contando además con una nueva contrata de limpieza viaria, que se ajusta a las necesidades del Ibi actual, y se han recuperado proyectos que en 2022 estaban prácticamente perdidos. Además, se han regulado muchos procesos económicos, como el pago de las prestaciones económicas individualizadas o el sistema de pagos de horas extra, gratificaciones y productividades, dotándolo de seguridad jurídica para los trabajadores y el Ayuntamiento, y la participación en los Tributos del Estado, y la cantidad recuperada asciende a seis millones millones de euros.