CASTELLÓ. A Heatwaves le rodea un aura muy fílmica por varias razones. Su vocalista, Ana Beltrán, fue descubierta por otros dos miembros cuando cantaba en un karaoke. La realizadora era ajena a este mundo, pero entonces decidieron hacerle una prueba de sonido para la nueva formación que estaban creando en Castelló. Un giro inesperado en su vida, que bien podría servir de gancho para cualquier película de ficción.
Pero además de esto, la música del grupo de power pop fue elegida para formar parte de la banda sonora de Valeria, la serie inspirada en la saga de novelas de la escritora valenciana Elísabet Benavent, que puede verse en Netflix. Gracias a esto, su 'I do, I do' acumula más de cien mil reproducciones en Spotify. "La verdad es que tenemos un estilo muy fílmico, nos encantaría hacer más fusiones", expresa Beltrán.
Los sonidos de los castellonenses recuerdan a las 'girlband' de los setenta, con una mezcla de power pop y actitud punk. Y esa es la clave de su enganche. No hay muchas más formaciones españolas que, con este estilo, creen sus propios temas. Cuando la banda empezó en 2015 se dedicaban a versionar canciones de los 70, pero poco a poco fueron introduciendo composiciones propias. Precisamente, este sábado presentarán en el ciclo de conciertos Al Port, en el Grau de Castelló, su cuarto EP Heatwaves #4, que publicaron a principios de año.
"El último disco supone una evolución con respecto a los anteriores álbumes, pero la base siempre la misma, recrear ese sonido de las 'girlbands' que tanto nos gusta", señala Juanjo Bru (guitarra y coros), quien junto a José Dolz (bajo y coros), Fernando Cabalo (guitarra y coros) y Tomás Escoín (batería), componen esta icónica formación.
Antes de crear lo que hoy es Heatwaves, ninguno de los músicos había tocado un estilo parecido. Confiesa Bru que les toca hacer falsetes para llegar a las tonalidades que piden las 'girlbands'. Y en el caso de Ana, se define como una 'popera Fibera'. "Siempre he escuchado mucha banda sonora y por aquí sí que me he topado más con este estilo, pero no era ni es un género que me caracterice. Me gusta la música en general y no puedo decir que sea mi estilo en particular, sin embargo cuando nos juntamos sale esto, sonamos sexy", explica.
Con los años han aprendido a comunicar al público la esencia de los setenta. Aunque esto no es lo más complicado. Lo más complejo es la composición de las propias canciones. "Empezamos con una idea básica, pero hasta que evoluciona a la melodía, voz, instrumentación y letra que queremos, es muy complejo", aseguran. Tan rica es su parte sonora que en los directos suenen distinto, ya que no pueden llevarse detrás los violines o el piano. "Toda esa instrumentación está muy presente en las grabaciones. Digamos que así sonamos más tristes, pero en directo mucha gente nos dice que les recordamos a Blondie".
En cuanto a las letras, no falla: hablan de amor. Y también de empoderamiento. "Son letras de lo más dispares. La temática estrella es el amor en todas sus vertientes. 'Don't say no' es una canción muy vibrante que habla en mayúsculas del amor. La compuso nuestro amigo Kurt Baker. Pero después tenemos otros temas que no tienen nada que ver con esto, hablan por ejemplo de los terraplanistas".
Lanzamiento tras lanzamiento, Heatwaves va afinando su sonido. La banda está acostumbrada a lanzar su música en formato de EP y, en consecuencia, los de Castellón ya trabajan en un nuevo disco que saldrá publicado el año que viene. Pero antes, tienen previsto grabar una 'rockaway session' en el estudio Rockaway. Además de ofrecer más conciertos por el resto de España.
Más allá de esto, la banda afirma no tener planes. "Vivimos al día. Nunca hemos tenido una gran ambición, pero las baldosas se han ido colocado y hemos tenido un éxito relativo. Sin planteárnoslo este verano estuvimos en un festival de Italia. Sonamos mucho en Radio 3 y nos introdujeron en la banda sonora de Valeria. A partir de aquí iremos viendo, no hacemos planes a más de un año", concluyen los de Castellón.