El edil de Hacienda, Francisco SolerELCHE. La gestión del presupuesto y en general la hacienda local sigue siendo uno de los puntos de mayor fricción en la corporación municipal. En los plenos son habituales los debates entre el concejal del área, Francisco Soler, con la edil socialista Patricia Maciá, exedil del departamento. Este lunes saltaban chispas entre ambos primero en la comisión de Hacienda, y después en declaraciones a los medios de forma cruzada. Entre los motivos, el uso del remanente del bipartito, que de 27,5 millones en marzo ha quedado en poco más de 2 millones ahora y el gasto en personal, como contaba este medio, así como partidas dadas de baja de años anteriores como el centro social de El Altet, puesto en tela de juicio por los socialistas. En el fondo, dos maneras muy distintas de ver la gestión de la hacienda del Consistorio.
Así, una de las cuestiones que enfrentaba es ese uso del remanente, el más alto de los últimos tiempos. La última modificación presupuestaria supuso utilizar 5 millones de euros, lo que lo ha reducido a poco más de 2 millones, destinando unos 4,5 millones para refuerzo de personal: contrataciones y horas extra, com confirmaba también el propio Soler. Para Maciá, quitando el 30% de uso obligado por estar comprometido (como sentencias urbanísticas de Torrellano o Aljub, de anteriores gobiernos), lamenta que "ese uso del remanente no haya ido para gastos de vivienda, alquiler o necesidades de la ciudadanía, el resto de ese 30% es para uso caprichoso", apuntaba.
Una observación que hacía precisamente al calor de ese Capítulo 1, el de plantilla municipal, que con los 4,5 millones de euros aprobados recientemente, pasa de 93,5 millones de euros del presupuesto inicial de este año a los 98,1 millones. Ese casi centenar de millones suponen "un capítulo más que tensionado", esgrime Maciá. Aunque lo que se consolida seguro son la nueva RPT o el factor 12 de especial dedicación, es decir, que ese aumento forme parte ya de inicio del nuevo presupuesto. Soler justifica que esta aprobación es necesaria "porque hay falta de personal, tanto en general como para acometer actuaciones que están atrasadas". El vicealcalde pone como ejemplo el poco personal que hay en Hacienda o Urbanismo, dos ejes del Ayuntamiento. Reconoce que es gasto para horas extra y contratación, y que de cara al presupuesto del año que viene "no prevemos que el gasto sea menor". Como es evidente, si se considera que hace falta el gasto ahora, a priori se incorporará de partida el año que viene. También intervenía posteriormente en un vídeo el concejal de Recursos Humanos, Juan de Dios Navarro, señalando que estas modificaciones se hacen para "tener el mayor presupuesto de la historia de Acción Social, para transformar nuestra ciudad o 1,7 millones de euros para el IBI". Y apuntaba que ellos hicieron una modificación de 13 millones en marzo de 2023.
Ahora bien, este uso del remanente, como ha venido contando este diario, supone incurrir en más 'inestabilidad presupuestaria', es decir, déficit, que está ahora en 13 millones de euros. Lo que podría penalizar con las reglas fiscales del Estado y suponer un plan de ajuste del presupuesto a través del Plan Económico-Financiero, como ya ha planteado la Interventora. Sin embargo, Soler quita hierro a este hecho y añade que su equipo está centrado en "una gestión que varía día a día", en relación a que esa inestabilidad no son más que "estimaciones", justificando en todo caso que por ejemplo esos gastos en contrataciones y horas extra son necesarios. Al calor de esa agenda municipal que de puertas hacia fuera se muestra siempre en marcha. El vicealcalde pone en valor que "se ha hecho un esfuerzo por revisar el préstamo que se ha bajado", ya que cabe recordar que se iba a pedir de 20 millones pero se ha reducido a 14,3 millones dando de baja partidas consignadas de préstamos anteriores. También se recurrirá a traspasos entre cuentas cuando sea necesario.
La concejal Patricia Maciá en la rueda de prensa"Hemos gestionado siempre mirando el no pedir más", decía preguntado por sus declaraciones de hace unos meses en las que se mostraba más comedido, apuntando a que quizá no hacía falta gastar todo el remanente, mientras que ahora se va en la dirección contraria. Asimismo, añade que sí se ha amortizado deuda con el remanente, ya que este sobrante de ejercicios anteriores se ha venido también utilizando para liquidar deuda con las entidades bancarias, aunque sin aportar datos. Pero al menos no esos diez millones que se preveían en el plan a tres años vista, por ahora. Allí por ejemplo se hablaba de un 37% de deuda a final de año, pero por los 20 millones de préstamo que no se solicitan, ejemplo de que las cifras irán variando constantemente durante el año.
Así, mientras que PSOE y Compromís optaron por un gasto más comedido y amortización de deuda, PP y Vox por ahora están aprovechando para gastar el grueso del remanente, confiando en que más adelante se irá justando y jugando con las cuentas. "Para nosotros —esa flexibilidad en el día a día—, esto es gestionar el presupuesto", mantiene Soler. Eso sí, en 2025 entrarán otros factores en liza como las reglas fiscales desde el inicio del año, y una rebaja de impuestos que a priori no solo se debe mantener sino aumentar. Para la concejal del PSOE, "están dilapidando la gestión económica con gasto superfluo, el alcalde se cree que esta es su casa, cambiando farolas que ya funcionan o pintando el Ayuntamiento a su gusto".
Maciá sostiene que se inyecta dinero al Capítulo 1 de Personal porque no hay suficiente hasta final de año, y que esto se debe a falta de planificación presupuestaria. Y ponía como ejemplo que el propio Ejecutivo ha eliminado partidas que él mismo consignó hace un par de meses con el remanente, como 100.000 euros a emancipación joven, 80.000 euros a vacunación infantil, 300.000 a bonos comercio y 60.000 euros a leasing de coches de Policía Local.
Por último, la concejal esgrime sobre las declaraciones de Recursos Humanos respecto a la especial dedicación "para ahorrar 500.000 euros de horas extra", señala que según los datos que han pedido en 2023 los gastos de horas extra ascendieron a 63.000 euros. Y criticaban, una vez más, la eliminación de partidas consignadas de años anteriores, como la de 300.000 euros para el centro social de El Altet, "cuyo proyecto dejamos redactado por Pimesa". Maciá sembraba la sospecha de si ello iba a suponer que no se ejecutara, a lo que preguntado, Soler argumenta que "esa partida es de un préstamo de 2020, cabría preguntar por qué no la ejecutaron en 2021, 2022 o 2023", y defiende que para pagar intereses por una partida no ejecutada, mejor darla de baja y destinarla a otra cuestión. Sin renunciar a su ejecución en el futuro. "Se pretende hacer, pero hasta que la Conselleria no nos dé le permiso que hace falta para los terrenos, destinaremos ese dinero a otras partidas y se modificará el presupuesto cuando toque".
Asimismo, Maciá también ponía el foco sobre la subvención 'Fuego de María', vinculada al Benefactor de la Infancia, "que no tiene ni sede en Elche ni aparece en el registro municipal de entidades y les van a dar 15.000 euros", señalaba, ya que para otorgar estos convenios es preciso cumplir con estas bases; mantener un vínculo con Elche. Ya en su análisis de primer año, el propio alcalde hablaba de que se había aprobado una ayuda para el proyecto de esta fundación que realiza en Perú. "Mientras, colectivos como ANOA tienen 4.000 euros o Integra-T 8.000 euros", señalaba la concejal. Una cuestión que habría generado choques entre Aurora Rodil de Vox, promotora del galardón, y la edil de Acción Social, Celia Lastra, del PP.
Así pues, un tema como el de la hacienda local, hasta ahora siempre en un segundo plano, a hacienda local, motivo de fricciones cada vez más frecuentes. Y en aumento.
