ALICANTE. A solo unas horas de que la asamblea de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana (FFCV) aprobase el presupuesto para 2023, su presidente Salvador Gomar visitaba la redacción de Alicante Plaza para responder a la denuncia contra él formulada días atrás por exdirectivos como Enrique Ortolá y Juan Serrano.
"Conozco de ella por los medios", decía Gomar sobre la misma, a la que se refería como "una 'vendetta' de dos o tres personas que estaban antes en la junta directiva y que después de cuatro años se resisten a marcharse". "La FFCV es una entidad transparente, la segunda Federación Deportiva de España en transparencia, toda la actividad y cuentas está auditada sin salvedades", ampliaba el dirigente, elegido para el cargo por primera vez en 2018 y que en junio pasado lo revalidaba por otros cuatro años.
"Esto no es como antes, ahora todas las decisiones se toman por órganos colegiados, siguiendo el trámite correspondiente de acuerdo con lo establecido en la normativa que atañe", insistía Gomar, aludiendo a la asamblea, a la junta directiva y a la comisión económica, de la que recuerda que Ortolá "era miembro como vicepresidente, además representando a la provincia de Alicante".
La denuncia gira sobre dos puntos: el salario de Gomar y su intervención en el verano de 2021 en beneficio del Alcoyano y en supuesto perjuicio del Hércules.
Respecto a salario o, mejor dicho, el incremento del mismo, el presidente de la FFCV era bastante claro: "Mi salario le cuesta 70.000 euros a la territorial [...] luego viene desde Madrid una profesionalización impuesta, un contrato que firman todas las territoriales con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y que establece una serie de requisitos para todas por igual [...] el resto de los emolumentos que percibo son consecuencia de esa profesionalización, de ese contrato que se impone", manifiesta para, a continuación, puntualizar que "todos los presidentes estamos en la misma banda salarial".
Y en cuanto a la acusación de haber beneficiado al Alcoyano en perjuicio del Hércules, Gomar llega a afearle a los denunciantes su desconocimiento de la normativa: "Es una denuncia cutre, ya podían haberse estudiado mejor los temas de competición", dice el máximo mandatario de la FFCV, pasando a continuación a remitirse a la circular 110 de la temporada 2020/21 y a la consecuencia que habría tenido el que la territorial no hubiese avalado al Alcoyano. Gomar explica que de no haber contado con el respaldo de la FFCV y, en cualquier caso, "no haber presentado ese aval" de 125.000 euros, el club de El Collao "no hubiese podido inscribir jugadores al bloqueársele los derechos federativos, lo que hubiera conllevado su expulsión a la tercera incomparecencia, lo mismo que le ha ocurrido al Internacional de Madrid esta temporada. No habría habido descenso o ascenso administrativo porque el Alcoyano ya estaba inscrito, gestionó por su cuenta el aval que exigía la RFEF a los equipos que participan en Primera Federación [...] solo en el caso de no haber sido inscrito se hubiese generado una vacante, pero el Alcoyano presentó el aval necesario gracias a uno de sus patrocinadores", apunta Gomar, antes de ampliar su explicación: "Es precisamente después de inscribirse cuando desde Madrid le plantean que al haber tenido denuncias ante la Comisión Mixta RFEF-Asociación de Futbolistas Españoles dentro de las tres temporadas anteriores ha de presentar un segundo aval y si no lo hace sus derechos federativos se bloquearán. El club me lo traslada y yo hablo con la RFEF [...] ellos me remiten un papel que no tiene mucho que ver con un aval, en el que se viene a decir que si hay denuncias nosotros nos haríamos cargo de todo lo que se reclame hasta el 30 de junio y que en esas mismas fechas estaban usando otras territoriales para ayudar al Real Murcia, al Albacete o al Deportivo de La Coruña, por ponerte solo unos ejemplo". No obstante no tratarse de un aval en su sentido estricto, Gomar deja claro que el Alcoyano les estuvo "rindiendo cuentas cada tres meses", estuvo sujeto a un control especial an la 2020/21.
Asamblea
Este viernes la asamblea de la FFCV aprobó un presupuesto de 13 millones de euros para 2023. Se trata de una cifra récord, como también es la de licencias: más de 108.000, algo que se debe en gran medida a su apoyo al fútbol femenino, algo que encarna bien la bautizada como área 'Valenta'. Por cierto, también veía la luz una reordenación de la competición bajo su paraguas, buscando que los campeones de Preferente asciendan de manera directa.