FINESTRAT. Las empresas ya tienen abierta la veda para abrir nuevas gasolineras en Finestrat, y se va notando. El Ayuntamiento tiene en trámite al menos dos proyectos que se concentran en la zona de mayor actividad económica: el Bulevar comercial. Un área donde ya hay ocho espacios de venta de carburantes, y la competencia no para de incrementarse. Para ello, Plenoil y Jose Roselló Llorens han solicitado licencia ambiental al Consistorio casi al mismo tiempo.
Como ya explicara este diario, hace tres años la administración local optó por suspender la concesión de licencias para cambiar la normativa local. De este modo, procedían a la modificación puntual número 16 de las normas subsidiarias sobre uso para las estaciones de suministro de combustible para vehículos (gasolineras) de la Ley de ordenación del territorio, urbanismo y paisaje (TRLOTUP). Regulaban así el suelo donde se podrá localizar, las condiciones y parámetros urbanísticos. Entre otros asuntos, el Consistorio triplicaba la superficie necesaria para su instalación, pasando de 500 a 1.500 metros cuadrados.
En los dos últimos meses el Ayuntamiento ha sacado a información pública la solicitud de licencia ambiental para estos dos nuevos proyectos. El primero fue el de Plenoil, que se ubica en el Carrer Alacant, número 25, a escasos metros de la ya instalada Zarcar. Se sitúa sobre una parcela de 2.977,88 metros cuadrados de superficie con un uso principal de implantación industrial, y comercial de subsidiario.
La empresa estima que el presupuesto para la ejecución material asciende a 440.962,52 euros. El proyecto se diseña sobre tres isletas para surtidores de carburantes de cuatro mangueras para vehículos ligeros, exclusivamente de Diésel y Gasolina SP-95. Y se hará sin atención personal. El almacenamiento del combustible será a través de dos depósitos soterrados independientes en un foso: uno de los tanques contará con una capacidad de 60.000 litros para Diésel y el otro con una capacidad de 60.000 litros para Gasolina SP-95.
Con respecto al otro proyecto, lo promueve la empresa encargada del lavadero que hay en la avenida Pais Valencià, número 32, junto a Katakata, en la misma calle que Zarcar. En la actualidad, cuenta con licencia de actividad para el lavadero de vehículos. El objetivo es ampliar este espacio con al venta de carburantes, para lo cual, ya cuenta con el certificado de compatibilidad urbanística y la idea pasa por modificar la licencia existente.
En su proyecto, la promotora ya indica que cumple con el mínimo exigido de los 1.500 metros cuadrados: dispone de una superficie de 1.705,5 metros cuadrados. A su vez, recoge que las entradas y salidas no entorpecerán el tráfico en las vías del entorno y contará con cinco plazas de aparcamiento. Además del lavadero, la estación de servicio tendrá una oficina que dará uso a la actividad. Mientras que la parte de carburantes estará compuesta por un surtidor doble con isleta propia y estará asistida 24 horas por dos trabajadores.
Para todo ello, la zona de lavado se mantendrá en las condiciones actuales, al tiempo que la de aspirado se desplazará hacia el interior de la parcela para poder ubicar el surtidor, la oficina y los aseos. En este sentido, la superficie se amplía 16 metros en su fondo para dar cabida a todo lo planteado. Además, como en el caso anterior, se dispondrá de un depósito de carburante enterrado, que será para Diésel y gasolina de 60.000 litros. Por último, especifican que el presupuesto de ejecución material es de 158.845,13 euros, con un plazo de ejecución de cuatro meses.
Con estas dos, serían 10 las estaciones de servicio que habría en la zona, con marcas como Cepsa, Repsol, Petroprix o la propia de Carrefour.