ALICANTE. Los dos centenares de aficionados del Hércules desplazados a Barakaldo este domingo abandonaron el estadio Nuevo Lasesarre con una sonrisa de oreja a oreja.
Lo hicieron así por el resultado favorable para su equipo, porque sus jugadores hubiesen sabido sobreponerse al gol visitante, marcando a domicilio, algo que puede resultar clave de cara al choque de vuelta.
El momento álgido de la tarde llegó en el minuto 72, precisamente cuando Benja Martínez empataba el duelo a la salida de una falta. El futbolista cedido por el Elche resultó providencial para los intereses de los blanquiazules y aunque eligió mal la esquina en la que celebrar el gol, a la finalización del encuentro se dirigió junto al resto de sus compañeros a la zona de la tribuna norte en la que se encontraban los aficionados para agradecerles su apoyo.
Por cierto, Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramirez, que siguieron el choque desde la zona noble de Lasesarre, celebraron la victoria como el que más. En la primera línea de palco el Hércules estuvo representado por Carlos Parodi, mientras que en la segunda, junto a los empresarios, estuvo Javier Portillo.