ALICANTE. España y Portugal recuperaban semanas atrás la vieja aspiración de organizar un Mundial de Fútbol de manera conjunta.
El pasado 4 de junio, el Rey de España, Felipe VI, el presidente de la República de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y su homólogo portugués, Antonio Costa, firmaban en Madrid un acuerdo de cara a la organización de la Copa del Mundo de Fútbol de 2030, después de haber visto cómo Rusia les ganaba la carrera por la edición de 2018.
La ciudad de Alicante y el estadio José Rico Pérez formaron parte de la primera versión de la bautizada entonces como Candidatura Ibérica: eran 21 sedes, de las que solo dos estaban en territorio luso (tres estadios en los que se jugarían 19 partidos) y el resto en España (donde se disputarían 45 encuentros). La participación de la capital de la provincia y el coliseo blanquiazul, entonces propiedad de la hoy liquidada Aligestión Integral, estaba condicionada a una remodelación que hubiese incrementado su aforo hasta las 40.000 localidades. La actuación ya era de por sí bastante fantasiosa (de hecho, se está a la espera de conocer la opinión de la Justicia sobre todo lo que rodeó el Plan de Reforma Interior del Rico Pérez), pero tampoco desentonaba tanto en un contexto en el que se contemplaba la terminación del Nuevo Mestalla en Valencia o la construcción de un nuevo estadio en Zaragoza que sustituyera a la también vetusta Romareda. Precisamente la antigüedad de las instalaciones era uno de los talones de Aquiles de la candidatura que en la preselección inicial de sedes sí incluyó a Elche y el estadio Martínez Valero. Aroma a Mundial 82.
Mucho tendrían que cambiar las cosas para que la provincia de Alicante se viera en una igual a la de los años de Naranjito, pero no por Elche... por Alicante. La primera no llegó a colar su nombre en la lista definitiva de sedes de cara a la I Candidatura Ibérica, pero ahora lo tendría infinitamente más fácil que la segunda y no solo porque ya no esté Valentín Botella, hoy presidente de la Fundación del Hércules y entonces, además de socio de Aligestión, miembro de la directiva de la Real Federación Española de Fútbol, directamente porque Alicante 'no cuenta' con estadio: lo único que conserva el Rico Pérez de lo que se entiende a día de hoy por estadio de fútbol es el nombre. Mucho tendrían que cambiar las cosas (para empezar que el Ayuntamiento y Generalitat dejen de mirar hacia otro lado; basta con que a alguien recupere la vergüenza, aunque sea ajena).
En Elche, por el contrario y no sin dificultad, se ha ido modernizando poco a poco el Martínez Valero (sin gastar un euro de dinero público; siempre a costa del riñón del club franjiverde) hasta el punto de que ha consolidado hace tiempo la categoría cuatro estrellas... Lo anterior unido a que el equipo de la ciudad acompaña (ahora por segunda campaña consecutiva en Primera División), le coloca en una buena posición para optar a integrar la reedición de la candidatura ibérica anunciada por Portugal y España.
No lo tendrá nada fácil tampoco, pero el esfuerzo vale la pena y no solo a nivel de promoción, también en cuanto a rendimiento en dinero contante y sonante. De acuerdo con el informe Impacto Económico Extranjero de una Eurocopa o Mundial de kelbet.es, es que solo la presencia de aficionados foráneos en la ciudad de Elche por ser sede de un Campeonato del Mundo de Fútbol (acogiendo al menos cuatro partidos) dejaría más de 26 millones de euros: la hostelería y el comercio de Elche se beneficiarían de 13.861.000 euros, mientras que el sector hotelero rozaría los 12.476.000 en pernoctaciones.
Para llegar a esas cifras, el citado estudio tiene presente desde el aforo del Martínez Valero, al 'average daily rate' o ingreso medio de una habitación ocupada en hoteles de la Comunitat para tres días y dos noches y el gasto diario medio de un turista extranjero en ese lapso de tiempo según el Instituto Nacional de Estadística , además de las estadísticas de asistencia y el ratio de entradas vendidas a extranjeros con motivo de precisamente el Mundial de Rusia en 2018.