ALICANTE. Emre Çolak se convertía este lunes en el protagonista extradeportivo del Intercity... y casi del fútbol patrio.
Un día después de debutar con el club de los hombres de negro, el delantero turco subía una historia a su cuenta de Instagram anunciando que colgaba las botas: "Dejo el fútbol. Trabajo de la mano de todos los que se esfuerzan por mí, Dios los bendiga. Desde hoy viviré para la felicidad de mi familia. Tengo una vida, pasaré tiempo con mis seres queridos", decía. La misma duró las horas que necesitó el director deportivo Jorge López para contactar con el futbolista turco, quien un día antes se había mostrado satisfecho de haber disputado sus primeros minutos con el equipo, precisamente en la victoria del Intercity ante el Bilbao Athletic. Pero es que Emre no solo había colgado la citada 'storie', es que no se había ejercitado a las órdenes de Gustavo Siviero la mañana del lunes, tal y como era su obligación.
La versión oficial del club es que el futbolista estaba atravesando un mal momento en lo personal, como consecuencia del terremoto que ha asolado a su país, aunque a la misma hora circulaban otras oficiosas como que su cuenta de Instagram le había sido jaqueada. El caso es que por la noche el futbolista hacía una nueva publicación en la que se desdecía de su decisión de colgar las botas.
Emre Çolak recaló en el Intercity en el pasado mercado de fichajes de invierno, tras jugar la primera mitad del curso liguero con el Göztepe. de la segunda división de su país. A sus 31 años, Çolak sumaba la experiencia en el Intercity a su prolífica trayectoria en el mundo del fútbol: internacional con Turquía y ganador con el Galatasaray de los títulos de Liga, Copa y Supercopa, también ha jugado en LaLiga SmartBank y LaLiga Santander con el Deportivo de La Coruña en dos etapas, entre 2016 y 2020.