ALICANTE. La Comunitat Valenciana puede presumir de contar con más de 400.000 empresas domiciliadas en algún municipio de la autonomía. Un potencial económico que, sin embargo, queda en entredicho cuando se baja al detalle para observar de cerca la actividad de esos cientos de miles de sociedades mercantiles. Según un estudio elaborado a nivel nacional por la firma especializada en estadísticas mercantiles Iberinform, filial de Crédito y Caución, apenas la mitad de las empresas que constan como activas en el Registro tienen en realidad actividad.
Según dicho informe, que ha establecido como criterios para considerar que una empresa tiene actividad el que presente sus cuentas anuales regularmente y que protagonice la inscripción de algún acto en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, el 51% de las empresas españolas que se consideran oficialmente activas no tienen realmente actividad.
El equipo de analistas de Iberinform ha identificado casi dos millones de empresas españolas registralmente activas que no han publicado actos ni depositado cuentas en los registros oficiales durante los últimos años, según indica la firma. Al mismo tiempo, al examinar el número de empresas que han depositado sus cuentas anuales en el Registro Mercantil, se observa una caída del 8% desde el máximo histórico registrado en 2007 hasta el último ejercicio presentado, correspondiente a 2020.
En la Comunitat Valenciana, según dicho estudio, son también el 51% de las empresas que constan como activas las que en realidad no presentan actividad en los registros oficiales desde hace tiempo. Un porcentaje que se traduce en más de 210.000 sociedades mercantiles, y que sitúan a la Comunitat como la cuarta entre las autonomías con mayor peso relativo de las empresas 'zombis' de España, solo superada por Canarias (55%), Andalucía (53%) y Ceuta y Melilla (52%). Por detrás de la Valenciana quedan comunidades como Murcia o Madrid (ambas con el 50% de empresas inactivas).
El incumplimiento de la obligación de depósito de cuentas puede suponer importantes consecuencias para la empresa, entre ellas, el cierre provisional de la hoja registral, lo que impide inscribir en el Registro Mercantil ningún documento (salvo alguna excepción, como el cese o dimisión de los administradores), la motivación para calificar un concurso de acreedores como culpable, la posibilidad de que tanto la propia empresa como sus socios o acreedores reclamen a los administradores los daños y perjuicios causados por el no depósito o la imposición de fuertes multas por parte del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC).
Los datos por comunidades autónomas muestran que Canarias es la comunidad que presenta una mayor tasa de inactividad (55%) entre sus empresas registralmente activas. Le siguen Andalucía (53%), Ceuta y Melilla (52%), Comunitat Valenciana (51%), Murcia (50%) y Madrid (50%). La Rioja (36%) es la comunidad española con un menor porcentaje de inactividad entre las empresas registralmente activas, seguida de Navarra (41%), Aragón (41%), País Vasco (42%) Castilla y León (42%) y Extremadura (42%).
En este sentido, y aunque se trata de parámetros no comparables, el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca) ya señaló en diciembre de 2021 que 80.000 empresas de la provincia de Alicante no tienen empleados, lo que no tiene por qué significar que no tengan actividad (pueden ser sociedades holding o microempresas en las que el propietario es el único trabajador), pero dibuja un escenario muy distinto al del dato general de empresas domiciliadas en la provincia, que son 144.000.