Protesta de los empleados afectados ante la puerta de la Euipo, el pasado diciembre. Foto: CCOOALICANTE. Pasan los días y la nueva concesionaria del mantenimiento de la sede de la euroagencia de propiedad intelectual, Elecnor, sigue enrocada en su postura de no subrogarse al personal que venía ejerciendo estas labores con la anterior empresa, Ferrovial. Según denuncia el sindicato Comisiones Obreras (CCOO), la nueva concesionaria del mantenimiento de la Euipo ofrece a los empleados contratados por la empresa saliente incorporarse a la nueva plantilla si antes firman la baja voluntaria en Ferrovial, lo que supone renunciar a su antigüedad y condiciones, que de subrogarse seguirían intactas.
El conflicto arrancó a finales del año pasado, cuando se oficializó la adjudicación a la nueva empresa y comenzaron los contactos con la plantilla. Según el sindicato, la propuesta de Elecnor pasa por firmar la baja voluntaria en Ferrovial, que tampoco despide a los empleados al considerar que deben subrogarse, para luego ser contratados desde cero por el nuevo adjudicatario. Algo a lo que la mayoría de los afectados se niega, dado que algunos de estos empleados superan los 10 años de antigüedad en su puesto y con la baja voluntaria perderían sus derechos.
Ha pasado algo más de un mes desde que se planteó esta oferta, y hasta el momento no ha habido acercamiento alguno entre plantilla y adjudicataria. Los trabajadores pusieron en marcha a principios de diciembre una campaña de protestas, con concentraciones en la sede de la Euipo y en la Subdelegación del Gobierno, que este lunes tuvo en la plaza de la Montañeta su último episodio, pero está previsto que sigan convocándose concentraciones hasta encontrar una solución, al menos durante todo el mes de enero.
CCOO denuncia que "una plantilla que llevaba años trabajando en esas instalaciones ahora está en el paro porque Elecnor no quiere subrogarlos con las mismas condiciones laborales y solo a aquellos que han firmado las bajas voluntarias perdiendo los derechos y condiciones con los que venían trabajando han sido contratados desde cero". Así, el sindicato asegura que "lo que ofrece la empresa son bajas voluntarias enmascaradas para que renuncien a las antigüedades y a las condiciones más ventajosas que vinieran disfrutando los trabajadores y las trabajadoras en la empresa saliente, Ferrovial".
CCOO insta a la empresa a reconsiderar esta situación y a mantener el empleo de la plantilla que lleva años trabajando en la Euipo, a la que también dirige sus críticas. "Queremos mostrar nuestro malestar ante las personas dirigentes de la Euipo, que se lavan las manos y nada quieren saber de las malas prácticas laborales de la nueva empresa adjudicataria", aseguran. Mientras tanto, los empleados que no firman la baja para incorporarse a la nueva empresa siguen en el limbo, sin trabajar y sin poder inscribirse en el paro.
