Nave de Juguetilandia en la calle Reus, junto a la Avenida de CrevillentELCHE. El Ayuntamiento lleva años intentando subastar varios solares de su propiedad de difícil colocación en el mercado por su tipología, la mayoría de tipo residencial, aunque según el Ejecutivo, tienen poca salida en el mercado inmobiliario por sus características; y en el caso de usos municipales, menos. De hecho, el solar que se ha adjudicado ahora, tal y como se aprobó en una Junta de Gobierno de este mes de marzo, es de uso industrial y terciario, por un precio moderadamente superior a los 300.000 euros a una compañía del propietario de Juguetilandia.
En este caso, se trata de Pastor Cantó SL, empresa patrimonial domiciliada en Finestrat y propiedad de José Luis Pastor, que también posee Ibilandia en Altea, dedicada a la explotación de jugueterías, y Pastor Toys International, también de Finestrat, y más conocida a nivel comercial como Juguetilandia. Por tanto, es el dueño de la nave existente en la Avenida de Crevillent y que está justamente en la calle Reus, donde ha adquirido ahora un solar que era propiedad municipal. Un terreno anexo al inmueble que podría permitir, en su caso, una ampliación de las instalaciones, en el caso de que sea ese su objetivo. Se trata de una parcela perteneciente al sector E-41 de 2.000 metros cuadrados, cuya venta ha sido por 307.734 euros.
Solar de la calle Reus, detrás de la nave de JuguetilandiaSe trata a su vez de un sector con previsión de desarrollo urbanístico para superficies comerciales de tamaño, por lo que podría verse actividad en el futuro. Se trata de uno de esos sectores que lleva tiempo pendiente de arrancar, ya que se inició el expediente en 2003, y ya en la legislatura de los populares se habló de su activación con el proyecto de urbanización valorado en 1,1 millones de euros. Una zona que está ahora en trámites para un gran impulso comercial y con opciones industriales, con más de 170.000 metros cuadrados.
Con esta venta se trataría del segundo solar que ha podido subastar el equipo de gobierno, ya que el primero del sector E-23, también de tipo industrial, se adjudicó el pasado mes de octubre por 101.000 euros a Invygal Investments, una empresa formada por los dueños de otras firmas como Galivi Solar y Zarzadilla Solar de una parte, y de Levantina de Mezclas Voluminosas o Ilicitana Sostenible por otra. Así pues, junto a la veintena de aparcamientos que también se vendieron por algo más de 80.000 euros, quedan por colocar en el listado de estos bienes para subastar siete solares y 38 aparcamientos. En cuanto a las parcelas, lo más difícil de colocar, quedan las de uso residencial en La Baia, en Vallverda, en Torrellano y Carrús Este. De los de uso compartido industrial y terciario queda el del Polígono de Carrús. En cuanto a las plazas de aparcamiento están repartidas por todo el término municipal de Elche.
Asimismo, aunque casi 'por goteo', se están subastando algunos de los terrenos municipales, los mismos que durante esta legislatura y que en los ejercicios recientes habían quedado a la espera. Eso sí, al igual que en presupuestos anteriores donde se ligó el dinero de su venta a inversiones sobre todo para vivienda y urbanización de sectores, una previsión que hasta ahora no se ha cumplido, el presupuesto de 2022 consignó nada más y nada menos que seis millones de euros de inversión gracias a la venta de terrenos, aunque en general. Los bienes de estas subastas están valorados en 1,9 millones de euros, que es más o menos la cifra consignada en el ejercicio de este año para parte de actuaciones como la demolición de edificios de San Antón, corredores verdes, mejora de dotaciones o señalización del Bimil·lenari. Lo cual no significa que de no lograrse todas esas ventas, estas partidas se sufraguen con otras formas de financiación.
