ALICANTE. El Hércules acumula desde el pasado mes de julio otros 400.000 euros impagados la Agencia Tributaria y la Seguridad Social.
El convenio suscrito en enero de 2013 con el fisco como acreedor privilegiado, obligaba al club a pagarle durante seis años un mínimo de 80.000 euros mensuales (160.000 en el caso de militar en Primera División) pero desde el citado mes no cumple con el mismo. A lo anterior hay que añadir los 20.000 euros mensuales que también ha de abonar a la Seguridad Social, obligación que tampoco está cumpliendo desde julio y que contrajo hace un año cuando renegoció con éxito a la baja el convenio que estaba vigente desde 2013 con la Tesorería.
FUE LA PRIMERA SAD EN ESPAÑA EN DECLARARSE EN CONCURSO DE ACREEDORES
Ese año el Hércules mantenía una deuda con Hacienda de 8,7 millones de euros y de 1,4 con la Seguridad Social, lo anterior apenas tres años después de haber ingresado 18 millones de euros, vía Fundación para saldar precisamente su deuda con las administraciones públicas. Un dinero que se corresponde, a ojos de la Comisión Europea con una ayuda de estado ilegal y que ahora ha deparado la desagradable sorpresa para el club de verse obligado a abonar 6,9 millones en concepto de intereses no devengados en su día.
El que el Hércules no cumpla los citados convenios no es una novedad; ya ocurrió el ejercicio pasado cuando en octubre suspendió pagos a Hacienda, desbordándose la situación en verano y es que el club se vio en la obligación de traspasar a Álex Muñoz al Sevilla por la mitad del dinero que un año antes pedía por sus derechos económicos, para saldar parte de la deuda millonaria que mantenía con el citado organismo público ante la amenaza de ver comprometida su viabilidad judicialmente.
Los citados impagos por parte del Hércules eran parcialmente confirmados este miércoles por el propio Juan Carlos Ramírez, socio de Enrique Ortiz en el club que aseveraba que "no podemos pagar un millón de euros al año a Hacienda estando en Segunda B", además de adelantar que no piensan abonar los citados 6,9 millones que exige Bruselas y retar "a la Generalitat o quien quiera a cerrar el Hércules".
El club blanquiazul que entró en concurso de acreedores en el verano de 2011 con una deuda de 59 millones de euros, pese a que acababa de militar esa campaña en Primera División ingresando solo por derechos de televisión 18 millones, ha consumido ya los dos años de carencia que se contemplaban en el convenio con los acreedores ordinarios aprobado también en las primeras semanas de 2013 y el próximo junio tendrá que volver a afrontar un nuevo pago de 1,5 millones de euros.
HA RECURRIDO A LA VÍA DEL CONCURSO DE ACREEDORES EN 2000, 2003 Y 2011
El militar en Segunda División B, una categoría sin apenas ingresos le llevó hace año y medio a iniciar conversaciones tanto con Hacienda, Seguridad Social, SUMA y acreedores ordinarios para lograr una segunda oportunidad, es decir, nuevos acuerdos que contemplen un calendario de pagos más flexible. Mientras que con SUMA y Tesorería se logró rápido una solución, la falta de gobierno en Madrid ha impedido sacar adelante un convenio menos "duro" con la Agencia Tributaria, algo que a su vez ha repercutido en el acuerdo con los acreedores ordinarios que desde el club sostienen que existe pero que no formaliza a expensas de lo que pase con el fisco.
A finales de noviembre el Hércules disputa una eliminatoria de dieciseisavos de final de Copa del Rey en la que ha quedado emparejado con el FC Barcelona. El partido de ida se disputará en el estadio José Rico Pérez y desde el club dan por hecho que se ingresarán un mínimo de 1,2 millones de euros. Es de suponer que dicha suma le permitirá reducir lo que adeuda a Hacienda y Seguridad Social. En ese momento ya no serán 400.000 si no 500.000 euros más los que les adeude.