ALICANTE. El Hércules regresa la mañana de este domingo al trabajo tras dos días de descanso con motivo de la festividad de Año Nuevo.
Pese a que el protocolo 'anti-covid' de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no lo contempla, al igual que hiciera tras las vacaciones navideñas, el club ha decidido someter a plantilla y 'staff' técnico a nuevas pruebas de detección de Covid-19, teniendo en cuenta lo contagiosa que es la variante Ómicron del Coronavirus y que los jugadores y el personal técnico y auxiliar han estado en contacto con más personas de lo habitual el 31 de diciembre y el 1 de enero. Salvo los dos positivos del pasado miércoles, el resto están citados en el Rico Pérez a las 10:30 horas para someterse a un test de antígenos. La sesión de trabajo, que se desarrollará en el césped del coliseo blanquiazul y lejos del alcance de miradas indiscretas (será también a puerta cerrada), no incluirá ninguna actividad colectiva en espacio cerrado: los jugadores han de llegar por separado y cambiados de casa, pues no se va a usar el vestuario, ni antes ni después del entrenamiento.
Las pruebas de este domingo no serán las últimas a las que tengan que someterse jugadores y cuerpo técnico antes del choque ante el Marchamalo del domingo 9, pues el citado protocolo de la RFEF sí exige la realización de un test de antígenos cada 15 días, concretamente entre las 72 y las 48 horas previas al primero de los partidos a disputar en cada quincena.
De detectarse algún positivo y ser asintomático, a diferencia de lo que ocurriera con los dos diagnosticados el miércoles, estos sí podrán beneficiarse de la reducción a siete días de período de aislamiento (si a lo largo del mismo tampoco desarrollan síntomas).