ALICANTE. En la planta noble del estadio Martínez Valero andaban este lunes revisando las acciones polémicas del choque ante elReal Betis del pasado lunes, con el objetivo de formular alegaciones al acta del mismo, buscando dejar sin consecuencias disciplinarias las cartulinas mostradas por Javier Iglesias Villanueva.
"Los abogados valoran cuáles son más factibles de ser impugnadas", decían a Alicante Plaza desde el club del Martínez Valero.
El plazo para presentar las mismas expira a las 14 horas de este martes y aunque no parece que el Elche vaya a precisar en qué casos busca la tutela del Comité de Competición, los mismos (y, especialmente, el destino de las alegaciones) se conocerán el miércoles, cuando el citado órgano de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) resuelva.
Hay ahora mismo tres futbolistas que con base a la redacción del acta que hizo Iglesias Villanueva se van a perder un mínimo de un encuentro (el del sábado ante el Real Mallorca), salvo que prospere la hipotética alegación del club franjiverde respecto a cada uno de ellos: el caso más llamativo es el del mediocentro senegalés Pape Cheikh, quien se expone a una sanción de entre 4 y 12 partidos de suspensión por "dirigirse hacia el cuarto árbitro con los siguientes términos 'qué hijos de puta sois'", en aplicación del artículo artículo 99 del Código Disciplinario de la RFEF. Los centrales 'Licha' Magallán y Enzo Roco, por su parte, se exponen a un castigo sensiblemente inferior, concretamente de un partido de suspensión. El primero en aplicación del artículo 121 del citado cuerpo normativo, al ver la roja directa por cortar con la mano una ocasión manifiesta de gol, y el segundo con base al 120, por ver dos cartulinas amarillas durante el desarrollo del choque por sendas manos.
El Elche cree que hay base para que el Comité de Competición aprecie la existencia de un error material manifiesto por parte de Iglesias Villanueva a la hora de valorar esas acciones, como también la cartulina amarilla que vio Helibelton Palacios. La prueba videográfica resultará clave... en los casos en los que el club franjiverde formule alegaciones, que cuesta creer que sea en todos empezando por el de Pape Cheikh, todo hay que decirlo.
El artículo 130 del Código Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol establece que "cuando un jugador, técnico o delegado comentan alguna infracción y resulten objeto de amonestación o expulsión del terreno de juego, el órgano disciplinario impondrá, respectivamente, la sanción de amonestación o un partido de suspensión salvo que el hecho fuere constitutivo de infracción de mayor gravedad, con la accesoria pecuniaria correspondiente". Ahora bien, a continuación recoge la siguiente previsión: "Las consecuencias disciplinarias de las referidas expulsiones podrán ser dejadas sin efecto por el órgano disciplinario, exclusivamente, en el supuesto de error material manifiesto". Dicho de otro modo, que cabe dejar sin efecto las consecuencias disciplinarias de las decisiones (cartulinas) mostradas por Iglesias Villanueva si se acredita que el pontedeumés incurrió en un error material manifiesto.
Lo anterior solo se podría acreditar en el caso de Cheikh si se aporta prueba videográfica acompañada de una declaración jurada de un experto en lectura labio-facial que desmonte lo que recogió en el acta el árbitro. Sería lo mismo que se hizo la pasada campaña con Johan Mojica, aunque en ese caso hubo que acudir a Apelación, ya que Competición sí castigó en primera instancia al colombiano.
Probar que Magallán no cortaba una ocasión manifiesta de gol se antoja más 'sencillo', toda vez que inicialmente el propio Iglesias Villanueva no valoró la acción así, aunque precisamente cambió de opinión tras ser invitado por su colega en el videoarbitraje a ver la jugada en el monitor situado junto a la entrada del túnel de vestuarios. Se da la circunstancia de que de formularse alegaciones contra esa roja y ser estimadas estas, el central se quedaría sin cartulina (tampoco se le 'anotaría' una amarilla, la tarjeta que Iglesias Villanueva le mostró inicialmente, pues lo anterior equivaldría a 'rearbitrar' el choque, algo que no es posible).
También parece 'factible' intentar probar que Helibelton no "golpeó a un adversario (Juan Miranda) con el brazo de forma temeraria en la disputa del balón", tal y como se recoge en el acta, y anular la amarilla que vio el colombiano e incluso buscar tumbar alguna de las dos cartulinas de ese color que vio Roco.
Por cierto, Schinocca estaba este lunes en Madrid representando al Elche en la reunión de LaLiga con la Comisaria de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud, Mariya Gabriel.
Queja al Comité Técnico de Árbitros
El club del Martínez Valero también sopesaba este lunes presentar una queja formal al Comité Técnico de Árbitros (CTA), aunque la posibilidad de que sirva de algo se antoja difícil. Esa es la razón por la que el Elche ha apostado por otras formas (quejas informales) para trasladar su descontento a Luis Medina Cantalejo, el presidente del CTA.
