José Navarro y Pablo RuzELCHE. El Plan Edificant continúa sembrando sentimientos encontrados entre partidos de la corporación, principalmente del Partido Popular, que suele utilizar el plan autonómico para hacer oposición contra el bipartito. Esta vez, denuncian una vez más la situación del instituto de Torrellano, aún con andamios, antes con el andamiaje de la empresa que quebró, y ahora con los que tienen que utilizar para el nuevo arreglo. Pero también por el nuevo colegio La Paz de la pedanía, ya que el equipo de gobierno anunció la semana pasada que había concedido la licencia de obras a la Generalitat para su construcción, y de momento no se ha traducido en ningún movimiento administrativo.
Hace tan solo diez días, desde la formación pedían soluciones para los centros educativos de Torrellano, no solo por el andamiaje del instituto, sino porque siguen sin llegar los nuevos barracones que tendrán que funcionar como aulas provisionales mientras se construye el nuevo colegio. De momento, la realidad es que aún no ha empezado la licitación para construir el nuevo La Paz, por lo que cuanto más corra el tiempo administrativo con su adjudicación, más complicado será cumplir con los plazos, que contemplaban la licitación en otoño —para lo que aún estaría en tiempo—, para poder empezar las obras en el primer trimestre de 2021. Como denuncian desde el PP, mientras no esté publicada la licitación, es indistinto cuándo se conceda la licencia de obras, por lo que el anuncio de hace unos días sería tan solo un 'gesto'. A juicio de Pablo Ruz, para aplacar las quejas de la comunidad educativa de Torrellano.
Así pues, la licitación aún no se ha publicado, y cuando se adjudique, primero habrá que demoler para construir in situ. Una operación de en torno a 5,5 millones de euros. Los nuevos barracones, que sí figuran en la plataforma de contratación, aunque no se puede acceder al trámite, aún no se han adjudicado. Llevan así desde junio, cuando se pavimentó la plataforma sobre la que se instalarán los barracones provisionales para el colegio. En cualquier caso, la intención de la conselleria es que estén listos para usar después de las vacaciones de navidad, por lo que podrían cumplir. Lo que critica el PP es que de todas formas, de momento no solo no hay movimientos, sino que la anunciada licencia de obras que se trasladó a la Conselleria la semana pasada, no ha tenido reflejo en ninguna de las plataformas de contratación por el momento.
Y mientras que no se instalen los barracones, no se pueden empezar obviamente las obras de demolición y construcción. Según indicaron desde la administración valenciana en su momento, la previsión inicial era haber culminado la redacción del proyecto de ejecución en abril, pero los dos meses de paralización de los procedimientos administrativos por el estado de alarma dejaron en punto muerto el estudio de cargas estructurales del nuevo colegio.
Para el PP, el anuncio de la licencia de obras del nuevo colegio, "no implica absolutamente nada, ya que Conselleria no ha establecido fecha alguna, no cambiando la situación y pretendiendo con conceptos jurídicos, engañar a unos padres cansados de promesas y jugar con sus esperanzas e ilusiones”.
