ALICANTE. Si hay un segmento del mercado inmobiliario en el que no se nota la crisis de la covid, como no se notó la anterior crisis financiera, es en el del lujo. Un nicho que la inmobiliaria Hilltop, de capital ruso, está dispuesta a aprovechar en la Costa Blanca. La inmobiliaria rusa, que promueve y construye además de comercializar (tanto inmuebles propios como de terceros), ha puesto en el mercado una exclusiva promoción de cuatro villas en Sierra Cortina, entre Benidorm y Finestrat, a razón de entre 1,17 y 2,17 millones de euros.
Se trata de la promoción Villas en Sierra Cortina, formada por tan solo cuatro chalés de superlujo a unos minutos de Benidorm, de las que la inmobiliaria rusa ya tiene vendida una. La promoción y ejecución de las viviendas corre a cargo de Rise, la rama promotora del grupo. Las villas tienen entre 300 y 500 metros cuadrados de superficie construida, en parcelas de 600 metros cuadrados. Según el tipo, van de 4 a 6 habitaciones y un número similar de baños, además de garaje para varios vehículos, solarium, piscina infinita, zona de barbacoa...
El lujo de las viviendas no se mide solo en los metros cuadrados, sino sobre todo en sus calidades. Aerotermia y colectores solares, suelo radiante, sistema de ventilación con filtración, aire acondicionado por zonas, un 'cerebro' tecnológico que controla la climatización, persianas de seguridad automáticas, cristales blindados... y una garantía de diez años son algunas de las prestaciones que ofrecen las villas. "Hilltop da mucha importancia a la calidad, la construcción de las villas se ha mimado mucho a costa del margen de beneficio", explica un portavoz de la compañía.
Estas villas son la estrella del catálogo de Hilltop, pero no son las únicas casas singulares que comercializa la inmobiliaria. En su catálogo destacan una villa sobre un promontorio en Calp que se vende por 3 millones de euros, o una villa en Campoamor, en Orihuela Costa, por 3,3 millones. "Pretendemos ser una boutique, no un almacén de viviendas", explican. La inmobiliaria trabaja tanto para clientes institucionales como para particulares, pero apuesta por un catálogo reducido para invertir en exclusividad. "El mismo cuidado que se pone a la construcción, lo aplicamos a la comercialización, en un sector donde no se cuida especialmente el servicio hacia el vendedor".
Los propietarios de Hilltop y de su constructora, Rise, provienen del sector de la construcción en su país, pero llevan varios años afincados en la Costa Blanca. Ahora buscan trasladar a España su experiencia en Rusia, en busca de un cliente selecto. "Inicialmente se puso el foco en el cliente extranjero y sobre todo ruso, que era lo que conocíamos, así como el británico, proclive a invertir en la zona", explican. "Sin embargo, ahora hay mucha más demanda nacional, quizá porque los españoles tienen más fácil desplazarse para visitar las viviendas tras el estallido de la pandemia",.
