El alcalde, Luis Barcala, y la vicealcaldesa, Mari Carmen Sánchez, en un pleno, en imagen de archivo. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. El bipartito al frente del Ayuntamiento de Alicante, compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), opta por mantener su propuesta de presupuesto para 2020 sin introducir modificaciones específicas que puedan planificar la posible respuesta municipal para atender al escenario de postcrisis provocada por el coronavirus. Así, este lunes ha quedado convocada la comisión de Hacienda para el debate de las enmiendas presentadas por los grupos de la oposición y, también, la sesión extraordinaria en la que la planificación económica se someterá a votación, el próximo lunes, día 30, que se celebrará de forma telemática, según han confirmado fuentes municipales a través de un comunicado.
Las mismas fuentes han detallado que el alcalde, el popular Luis Barcala, ha decidido continuar con la tramitación de las cuentas, que se encontraban en fase de presentación de enmiendas, "tras recibir un informe elaborado por la Oficina Presupuestaria del Ayuntamiento de Alicante en el que se aconsejaba esta opción como la mejor entre todas las que se han contemplado". Como publicó este diario, el bipartito había sopesado la posibilidad de mantener el presupuesto de 2019 prorrogado, al tiempo que se introducían modificaciones de crédito para incluir líneas de ayuda a particulares y colectivos afectados por la crisis sanitaria.
No obstante, según el mismo comunicado, en la decisión definitiva de impulsar un nuevo presupuesto habría pesado que la prórroga de las cuentas de 2019 se traduciría en una disminución de ingresos de 5,6 millones de euros "en unas circunstancias en las que va a necesitar toda la capacidad de gasto para afrontar la situación creada por la expansión del Covid 19". Igualmente, según las mismas fuentes, "también se ha sopesado la pérdida de las inversiones que contempla el presupuesto de 2020, entre ellas el importante paquete previsto para las actuaciones integradas dentro de la Edusi", el plan de reurbanización del área de Las Cigarreras, cofinanciado por la Unión Europea (UE).
El comunicado incide en que esa situación "se traduciría en una paralización" de esas inversiones "y en consecuencia en el bloqueo todas las posibilidades del Ayuntamiento para ayudar en la recuperación económica y en la creación de los puestos de trabajo que estas actuaciones iban a suponer". Además, "otro de los riesgos que se corría con la prórroga de los presupuestos de 2019 es el bloqueo de todas las nuevas contratas que preveían las cuentas de 2020 y la inviabilidad de las mejoras que se han establecidos en otras contratas ya adjudicadas, como es el caso del mantenimiento de parques y jardines", además del modificado del contrato de la limpieza viaria y recogida de residuos para incorporar servicios no previstos en el pliego actual.
Según el comunicado, el alcalde ha comunicado su decisión a los portavoces del resto de grupos políticos en una Junta celebrada a última hora de este lunes, en la que se habría comprometido a destinar prioritariamente el remanente de tesorería de la liquidación de los presupuestos de 2019 a financiar todas las actuaciones que sean necesarias, dentro del ámbito de las competencias municipales, para sostener las políticas sociales que ya se han implementado y las que se puedan activar en un futuro y para incentivar la recuperación económica de la capital de la provincia. Se trataría de un compromiso para incorporar medidas adicionales no previstas en la propuesta contable trazada para 2020, elaborada antes de que se desatase la crisis del Covid 19.
Barcala promete a los grupos de la oposición destinar el remanente de crédito de 2019 a atender políticas sociales e incentivar la recuperación económica
Lo cierto es que ese factor ya ha llevado a los cuatro grupos políticos que ejercen funciones de oposición a posicionarse respecto a esa propuesta de presupuesto. Como informó Alicante Plaza, PSPV-PSOE, Unides Podem, Compromís y Vox han expresado ya su preferencia por otras alternativas: la elaboración de un nuevo presupuesto negociado y adaptado a las nuevas necesidades que surja del consenso político o la prórroga de las cuentas de 2019, adaptadas a esa nueva situación generada por el Covid 19.
Hasta el momento, ninguno de esos cuatro grupos políticos ha confirmado que vaya a facilitar la aprobación del presupuesto del bipartito. PP y Cs necesitan al menos una abstención o un voto favorable para que su propuesta prospere, ya que los dos partidos aliados al frente de la gestión municipal suman juntos 14 concejales en una corporación de 29 ediles.
Está por ver si ese compromiso y el contenido del informe de la Oficina Presupuestaria pueden convencer a alguno de los cuatro partidos opositores para que puedan prestar el respaldo que resulta imprescindible para validar las cuentas. Por lo pronto, en las explicaciones facilitadas durante la Junta de Portavoces se habría indicado que mantener la prórroga del presupuesto de 2019 para introducir modificaciones presupuestarias también requeriría una tramitación de un mes, de modo que no resultaría una opción ágil.
