ALICANTE. El enredo sobre la implantación del sistema de estacionamiento regulado (más conocido como la zona azul o la ORA) en el barrio de Pla-Carolinas de Alicante continúa sin resolverse tras el desarrollo de la reunión de la Junta de Distrito Número 2, este jueves. Lo cierto es que el desenlace de la cita no hizo más que alimentar el debate sin que se aportase ninguna solución definitiva que pueda aportar luz al conflicto, más allá del compromiso de constituir una comisión mixta (con representantes vecinales, de los comerciantes y de los grupos políticos) para impulsar un Plan de Movilidad para el barrio, según apuntaron fuentes presenciales.
En primer término, la sesión no contó con la presencia de ninguno de los representantes de las asociaciones vecinales del Pla y de Carolinas que se han mostrado a favor o en contra de la instauración de ese sistema (con el que se pretendería favorecer la rotación en las plazas de estacionamiento). Así, no llegó a plantearse ninguna reflexión sobre el recurso de reposición registrado por la Asociación de Vecinos El Eco del barrio del Pla por el que se solicita al equipo de gobierno (el bipartito compuesto por PP y Cs) que anule el decreto por el que se suspendió la implantación de la zona azul, de modo que ese proceso pueda reactivarse.
Por el momento, ese recurso sigue vivo, a la espera de que pueda ser contestado por los técnicos municipales, según concretó este viernes, el alcalde, el popular Luis Barcala, al ser cuestionado al respecto, en el transcurso de una comparecencia pública. Al margen de ello, el primer edil se limitó a detallar que no tenía conocimiento de los argumentos del recurso por lo que no podía pronunciarse.
No obstante, el representante de la Asociación de Vecinos de Juan XXIII, Francisco Camacho (el único miembro de la Junta elegido como representante vecinal que acudió a la reunión), sí tomó la palabra durante la sesión para recriminar que el equipo de gobierno hubiese decidido renunciar a la implantación del sistema en base a los resultados de una encuesta, sin haber tenido en cuenta las decisiones previas alcanzadas en el seno de la Junta de Distrito. Según fuentes consultadas, el dirigente vecinal de Juan XXIII aseguró que, como mínimo, se debió haber consultado e informado a la Junta tanto sobre la elaboración de ese sondeo como sobre la decisión de revertir la implantación de la zona azul, ya que fue en la propia Junta en la que se abogó por su instauración.
En este sentido, llegó a plantear la posibilidad de que se formulase una suerte de referéndum o de consulta popular entre los residentes del barrio para conocer cuál era su opinión real (al margen de la tendencia reflejada en la encuesta elaborada por la Concejalía de Coordinación de Proyectos) antes de tomar una decisión definitiva sobre el futuro de la ORA.
La Junta de Distrito preacuerda crear una comisión mixta para impulsar un Plan de Movilidad en el que se propongan alternativas para solucionar el problema de falta de plazas de estacionamiento
No obstante, la propuesta quedó en el aire, sin que se aceptase o se rechazase de forma expresa, pese a contar con el respaldo del portavoz de Unides Podem EU, Xavier López. Por su parte, los representantes de PSOE y Vox, Paco Sanguino y Mario Ortolá, instaron al equipo de gobierno a precisar el gasto generado hasta ahora por la implantación fallida del sistema (gastos por la señalización o por la realización de la encuesta, entre otros). Y, a la postre, solo se compartió la conveniencia de crear un grupo de trabajo que plantease propuestas para que se pudiese elaborar un Plan de Movilidad específico para el barrio, toda vez que la propia encuesta sobre la ORA había reflejado que la principal preocupación de los vecinos era el problema del aparcamiento, como expuso el portavoz de Compromís, Natxo Bellido.
Así, según confirmó el presidente de la Junta de Distrito y edil de Coordinación de Proyectos, Toño Peral (PP), se acordó que, en esa comisión, se presentarían sugerencias y alternativas para tratar de solucionar ese problema, de modo que se pudiese estudiar posibilidades para generar más plazas de aparcamiento, sin descartar la posibilidad de aplicar el sistema del estacionamiento regulado. "Seguimos pensando que es una solución viable para favorecer la rotación y que tendría un coste mínimo para los residentes; eso sí, lo que no vamos a hacer es aplicarlo si existe división entre los vecinos", concluyó.
