ALICANTE. La polémica por los pagos efectuados por la Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Alicante a un colaborador externo para que prestase el servicio de control sobre los puntos de compostaje de la ciudad llegará finalmente hasta la asamblea de Guanyar. El exedil responsable de ese departamento en el periodo en el que se produjeron los pagos, Víctor Domínguez, solicitó este martes, en la reunión ordinaria de la mesa de coordinación de Guanyar, la convocatoria de una asamblea extraordinaria con el propósito de facilitar explicaciones de primera mano. Esa asamblea se celebrará este jueves con dos puntos únicos en orden del día: comparecencia del concejal a petición propia y acuerdos a adoptar al respecto. A esa asamblea, Domínguez acudirá con la intención que ya manifestó este lunes de poner su acta de concejal a disposición de los componentes de la plataforma electoral.
Por lo pronto, el regidor ya detalló, este martes, en qué consistió la concertación de ese servicio ante el órgano de dirección de Guanyar en términos similares a los que reflejó en el comunicado remitido el lunes, después de que el diario El Mundo publicase que se había pagado "un sueldo público a un simpatizante de Guanyar". Domínguez mantuvo su versión al señalar que se había encargado la tarea a un particular, Javier Sirvent, que venía colaborando con la concejalía de Medio Ambiente como voluntario y de manera altruista desde 2015 en programas de repoblación vegetal. Apuntó que se consideró que reunía el perfil necesario para tutelar ese proyecto durante su puesta en marcha. Así, se le pagaba mensualmente por los trabajos realizados, tras la presentación de la factura correspondiente. En total, se le llegaron a pagar alrededor de 8.000 euros entre junio de 2017 y febrero de 2018, hasta que los técnicos recomendaron que no se firmase la autorización de nuevos pagos por separado por la prestación de un mismo servicio.
El edil comparecerá el jueves y pondrá su cargo a disposición de los componentes de la plataforma electoral
Domínguez insistió en que no conocía a Sirvent con anterioridad y que no formaba parte de su círculo de confianza; que desconocía si pertenecía a Guanyar aunque admitió que pudo haber acudido a alguna asamblea después de que iniciase la prestación de servicio para el Ayuntamiento; y que todos los pagos fueron fiscalizados por intervención sin que se pusiese ningún reparo ni impedimento.
Por último, añadió que se optó por recurrir a un servicio externo por la falta de personal de su departamento y señaló que los trabajadores municipales que desempeñan ahora el servicio, contratados a partir de los programas de promoción del empleo juvenil del Consell (Avalem Joves) sin coste adicional para el Ayuntamiento, no se incorporaron hasta agosto, por lo que no se pudo optar de inicio por encomendarles esa tarea. Además, dijo que los dos trabajadores empleados a través de ese programa que había solicitado para que se adscribiesen a sus concejalías debían destinarse a labores administrativas en el área de Limpieza y así se procedió, después de comprobar que Sirvent estaba desempeñando su labor de manera satisfactoria. Además, señaló que los pagos por ese servicio sólo se mantuvieron bajo su responsabilidad hasta el mes de noviembre, cuando Guanyar abandonó el equipo de Gobierno.