Foto: PEPE OLIVARES.BENIDORM. El Ayuntamiento de Finestrat ha pedido a la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo prorrogar por cuatro años más la declaración de Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT) de larga duración. El 30 de septiembre salió publicado en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) en el que se abría un plazo de diez días para alegar al procedimiento. La localidad ya tiene este horario especial de comercio en el que se permiten más días de apertura por su condición de municipio con turismo.
Tal y como recoge la documentación de Conselleria para la apertura del procedimiento, actualmente la declaración es de aplicación a los domingos y festivos del periodo comprendido entre el Domingo de Ramos y el segundo domingo de Pascua, excepto el 1 de mayo; y los domingos y festivos del período comprendido entre el 15 de junio y el 5 de enero, excepto el 9 de octubre, el 25 de diciembre o bien el 26 de diciembre cuando este sea declarado festivo por traslado de la fiesta de Navidad, y el 1 de enero.
En estos periodos los establecimientos comerciales tienen libertad para determinar los días y horas que permanecerán abiertos al público. Hay que tener en cuenta que Finestrat se ha convertido en uno de los puntos más importantes de la Marina Baixa para las compras en grandes marcas debido a la cantidad de empresas que se han ubicado en el centro comercial La Marina y en el bulevar comercial que le rodea.
El acuerdo de la Junta de Gobierno Local señala que la ZGAT que tiene el municipio concedida termina el próximo uno de enero de 2022. La solicitud para renovarla se apoya en los distintos informes municipales. Entre otros asuntos, apuntan a la ocupación media de los alojamientos turísticos, que en los últimos tres años (2017-19) ha sido de un 81,55% y las plazas de las que dispone la ciudad: unas 4.500 entre hoteles, apartamentos turísticos, campings y casas rurales. Además, calculan que hay 33,5% de segunda vivienda frente a las casas de residentes en la zona.
Para argumentar la relevancia turística del municipio, los técnicos municipales también aportan los bienes de interés cultural como son el Castell, la Torre y el Castellet; a lo que añaden los bienes de relevancia local o los espacios de protección arqueológica de especial interés.
