BENIDORM. El retraso del Ayuntamiento de Benidorm a la hora de licitar y adjudicar el nuevo contrato de la recogida de basura y limpieza tiene consecuencias. Una de ellas tiene que ver con las inversiones en la ciudad. El Consistorio ha tenido que recurrir a un contrato extra para adquirir nuevas papeleras puesto que la empresa actual no puede hacer la inversión. Para ello, ha sacado a concurso un nuevo servicio para el suministro de este mobiliario. Y no es la primera vez que dan este paso, hace un mes recurrieron al mismo método para los nuevos sistemas de recogidas separadas por riesgo a perder una subvención.
Ahora, la administración local ha licitado por 96.800 euros, impuestos incluidos, este servicio que solo incluye el suministro de las papeleras, pero no su instalación. De este modo, han realizado una estimación del número y características de las papeleras en base al precio unitario previsto y en función de las posibilidades presupuestarias del Ayuntamiento. En definitiva, alrededor de unas 115, que podrían variar al alza hasta agotar la cuantía económica.
El plazo para la presentación de ofertas se abrió el pasado 28 de octubre y finalizará el 14 de noviembre. La adjudicataria tendrá un periodo de tres meses hasta completar la entrega del material, que tendrá que ser como la que aparece en la imagen que acompaña a esta noticia.
Tal y como figura en el propio pliego, la prestación del servicio se realiza en la actualidad con la gestión indirecta de Fomento de Construcciones y Contratas SAU. Una relación que se extiende desde 1993 y que se prorrogó hasta el 31 de diciembre de 2019. Desde entonces, se mantiene por estar considerado como básico, a través de contrato por prestación de servicios. Por ello, explica el técnico, "no se contemplan inversiones para el suministro de mobiliario urbano, como las papeleras".
Al mismo tiempo, estos elementos son necesarios para "garantizar la correcta limpieza de las calles y viales, así como una adecuada prestación del servicio", continúa. Entre estas tareas está el mantenimiento de las papeleras y la reposición de aquellas que hayan sufrido daños irreparables. Al no poder invertir en ellas, el Ayuntamiento ha comprobado que en la actualidad hay un "importante déficit" de este mobiliario en los espacios públicos "que dificultan la correcta prestación del servicio de limpieza viaria".
La idea inicial era que el nuevo contrato de limpieza y recogida de residuos sólidos urbanos acometiera estas inversiones. Sin embargo, el pliego para la compra de estas papeleras -redactado en agosto- subraya que todavía está en su fase previa de licitación. "El retraso que viene sufriendo el mismo obliga a la Concejalía de Limpieza Viaria a plantear la adquisición de una dotación básica de papeleras, para cubrir las necesidades más perentorias del servicio".
Como ha venido contando este diario, el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) anuló el pliego del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos urbanos en base a un recurso interpuesto por los concejales socialistas. El organismo estimó cinco de los seis puntos expuestos que se regían por los reparos de Intervención. Dada la situación, el gobierno local optó por suspender el expediente para rehacer el pliego para adaptarlo a las indicaciones de la resolución.