ELCHE. Los trabajos para la reparación estructural del depósito semienterrado de Bonavista, con capacidad de 500 metros cúbicos, han arrancado este miércoles 26 de abril con un presupuesto de 203.313 euros y un plazo de ejecución de dos meses, ha informado el concejal de Gestión del Ciclo del Agua, Héctor Díez. El proyecto incluye la sustitución del forjado y de la cámara de válvulas, la instalación de un sistema de cloración, la adecuación de los accesos a la parcela donde se sitúa y la demolición del depósito elevado contiguo en desuso y con problemas estructurales. Con esta actuación se garantiza la calidad de la presión y continuidad del servicio de agua potable en Bonavista y parte de la pedanía de Altabix.
Tal como ha explicado Díez, la demolición del forjado se realizará con un robot de demolición técnica y será sustituido por un nuevo forjado formado por losas alveolares. El vaso interior del depósito se impermeabilizará con un mortero monocomponente apto para el contacto con agua potable de consumo humano y las placas alveolares se tratará con poliuretano viscoplástico. Además, se adecuarán los elementos de medidas de seguridad laboral y perimetral según establece la normativa actual.
El depósito elevado será demolido por seguridad debido a sus daños en su estructura y se sustituirá la caseta actual por otra que incluye tres recintos: bombas y telemando, cloración, control y medida. Y para los trabajos de urbanización, se adecuará el talud existente con un muro de contención de hormigón armado y se repondrá el vallado con una puerta de doble hoja.
Según Aigües d’Elx, la ejecución se ha retrasado por varias circunstancias ajenas a la empresa mixta desde que se adjudicó en de julio del 2020. La primera, por la necesidad del desvío de una línea aérea de media tensión situada en la cubierta del depósito y que dificultaba la ejecución de las obras, lo que obligó a gestionar los permisos con la Consellería de Industria y la empresa eléctrica, que hasta octubre del 2021 no concluyeron los trámites.
Esta demora coincidió con el incremento de precios de los elementos que integran la obra en el contexto de la recuperación económica posterior a la pandemia de la COVID-19; la inflación motivó a la firma contratista a renunciar a la adjudicación, obligando a Aigües d’Elx a una nueva licitación contemplando la actualización de precios además de varias modificaciones normativas relativas a la cámara de válvulas y el acceso a la parcela. “Finalmente, resueltos todos los trámites, la pedanía podrá disponer del depósito renovado en breve”, ha manifestado el edil.
La iniciativa forma parte del Plan Director de Infraestructuras del Ciclo Integral del Agua 2020-2030, que plantea las actuaciones necesarias para mejorar el nivel de servicio de las infraestructuras existentes, adecuándose a las exigencias actuales y anticipándose a las consecuencias del cambio climático.