ALTEA. Altea ha tomado medidas para que el municipio no vuelva a tener problemas en la calidad del agua los días de temporal, como han hecho en otras localidades como l'Alfàs del Pi. Así, la población ha aprobado un proyecto para la instalación de una planta de filtración a la entrada del depósito de cabecera de Montahud ubicado en el cruce de la Calle Houffalize con la CV-760, y de este modo reducir la turbidez y los sólidos en suspensión presentes en el agua procedente del embalse de Guadalest.
De este modo, dan cumplimiento a una de las promesas que anunciaban a finales de año y que ahora sale a fase de exposición pública durante 20 días para cualquier reclamación frente a esta construcción.
Tal y como destaca el proyecto en cuestión en su memoria, el agua del embalse de Guadalest, al ser un agua superficial, presenta problemas de turbidez, lo cual se acentúa en época de precipitaciones o en situaciones de sequía. Según consta en los estudios realizados durante el 2017 y 2018 por parte de la empresa gestora del abastecimiento del agua en Altea, se han sobrepasado los límites de calidad en varias ocasiones, no siendo potable para el consumo humano.
"Durante los últimos años se han venido acentuando los periodos de sequía y consecuentemente, un empeoramiento de la calidad del agua", dicen en la documentación a la que ha tenido acceso este diario.
Al mismo tiempo indican que este proyecto lo plantean de manera que se pueda ir desarrollándose o ampliándose de forma progresiva, intentando que las inversiones iniciales sean las estrictamente necesarias para poder implantar el sistema que garantice la eliminación de la turbidez.
El proyecto plantea ejecutar en una primera fase una estación de filtrado con 2 filtros horizontales los cuales son capaces de filtrar caudales de 66.6 l/s, a la cual se le puedan acoplar futuras ampliaciones divididas en dos fases en las cuales se disponga en cada una de ellas otro filtro horizontal aumentando de ese modo el caudal de filtrado a 99.9 y133,2 l/s respectivamente. Esto dependerá del crecimiento de la población de Altea.
La solución adoptada plantea la eliminación de la turbidez mediante sistemas de filtración profunda con filtros de arena, por entender que es la solución estándar más eficiente con la que se garantiza buenos resultados y un menor coste de explotación y mantenimiento.
Para todo ello, el ayuntamiento de Altea ha calculado un presupuesto base de licitación de 1.085.045,02 euros. Según consta en el proyecto, el plazo de ejecución es de ocho meses.