ELCHE. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha dado luz verde a la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto Red Arterial Ferroviaria de Elche y su variante para la conexión de su estación de Alta Velocidad en la pedanía de Matola con el centro urbano —proyecto que implicará 3,5 millones en expropiaciones—. La alternativa elegida entre las dos viables a nivel socioeconómico, que consiste en pasar por encima en el cruce de uno de los del ramales de conexión con la Línea de Alta Velocidad de Alicante-Murcia, tiene ahora que verse corregida tras la consulta pública de diferentes administraciones en cuestiones relativas a la flora y fauna, al terreno o a cuestiones hidrográficas.
Antecedentes del proyecto
El pasado 7 de febrero de 2019 fue cuando la Subdirección General de Planificación Ferroviaria de la Secretaría de Estado de Fomento entregó en el Ministerio su propuesta de trazado. Un año y un mes después, el pasado 7 de julio, el Ministerio de Transición Ecológica ya ha aprobado el trazado y la alternativa elegida. Una alternativa que busca permitir la circulación de los trenes de Cercanías a mayor velocidad que la actual, la reducción de los tiempos de viaje, el confort de las circulaciones, y el incremento de capacidad del tramo, ya que en casi toda la longitud de la Variante se proyectan dos vías. Eso sí la aprobación del proyecto, como siempre, está condicionada a distintas actuaciones para mitigar el impacto ambiental en la zona.