ELCHE. El equipo de gobierno ha logrado una subvención del Ministerio de Cultura para Patrimonio Unesco con el que quiere elaborar un Plan Rector para la red de regadío del Palmeral. Una actuación que pretende dar una visión integral a todo el conjunto, la Acequia Mayor, el Pantano y el Canal de Desvío de Lafarga. Precisamente, sobre el segundo, la Ley del Palmeral supone la declaración de Bien Inmaterial de Interés Cultural (BIC) genérica de otros elementos. Entre ellos, el pantano o la Acequia Mayor. Sin embargo, como todos estos bienes, necesitan de su propia ficha de protección para clarificar actuaciones. De hecho, en el caso de ambos, se incoó el expediente para esta declaración, pero caducó en 2015 por inacción de la administración valenciana.
En este sentido, y para cumplir con la Ley de Patrimonio valenciana, cada elemento con esta ratificación precisa tener su propia ficha de protección —la misma situación que la basílica de Santa María—, para delimitar cuestiones como su entorno de protección, cómo actuar sobre el mismo, o acceder a subvenciones públicas de distinta índole como rehabilitaciones. Sin embargo, a pesar de destacar que es la presa de arco más antigua de Europa (siglo XVII), la incoación de dicho BIC se encuentra caducada por inacción de la administración de la Conselleria de Cultura —según se dijo en su momento en referencia a la anterior administración— desde el año 2015. Algo que se extrapola también a la Acequia Mayor, ya que se iba a tramitar conjuntamente.
Un expediente sin finalizar
La Generalitat acordó esta declaración en 1999 con la categoría de Monumento, procediendo a la incoación como tal en 2003, incluyendo en su ámbito de protección el Canal de Desvío y parte de la Acequia Mayor. No obstante, en 2004 se modificó el mismo para incluir en la declaración la Acequia Mayor, y sus construcciones asociadas, así como el conjunto de las infraestructuras del Canal del Desvío del ingeniero Próspero Lafarga, al ser partes integrantes del monumento. Sin embargo, el expediente caducó 11 años después, en 2015. Cuando se incoa el mismo, justificando su valor a todos los niveles, se ha de completar con los mencionados entornos de protección. Cuestión que no se llegó a impulsar. Era el momento en el que se declaraba como zona medioambiental y se pretendía incluir también las montañas de alrededor, sistema, etc., para completar dicho expediente. Pero no se llegó a completar, aunque las fichas de cada elemento y los trazados sí están hechas. Hubo varias reuniones en 2016 en las que el Ayuntamiento instó a reactivar el procedimiento, pero no cuajó. Se llegó a aprobar en un pleno con una moción de Ciudadanos.