BENIDORM. Llegó el día. Después de numerosos plazos para su puesta en marcha, el Ayuntamiento ha puesto en servicio este martes 1 de julio la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Lo hace después de haber cumplido con seis meses en fase informativa y la principal novedad es precisamente que las infracciones podrán ser susceptibles de sanción. De momento, la administración local ya ha expedido más de 4.000 autorizaciones especiales para poder circular por estas vías cuyo acceso estará restringido.
Como viene contando este diario, el Ayuntamiento de Benidorm tiene que implementar la ZBE al ser un municipio de más de 50.000 habitantes, en cumplimiento de la Ley del Cambio Climático y Transición Energética. El objetivo es mejorar la calidad del aire y reducir la emisión de gases de efecto invernadero.
Para ello, el Consistorio dividió el municipio en tres zonas: Centro, Levante y Poniente, que ocupan 74 hectáreas. Disponen así de diferentes controles de acceso y con los sensores en marcha para su control, donde se han instalado lecturas de matrículas para agilizar el proceso.
Pero, ¿quién puede entrar a la ZBE? Cualquier empadronado de Benidorm, esté o no dentro de estas áreas restringidas, podrán circular libremente por la zona centro, excepto en las que ya estaba prohibido el paso previamente, como el caso antiguo, Boca del Calvari o Armada Española. También aquellos que estén autorizados expresamente por los motivos contemplados. Para ello, previamente tendrían que haber tramitado la solicitud en la plataforma abierta desde hace unas semanas. Además, el Ayuntamiento dispone de un punto de asistencia presencial en el que se puden resolver las dudas que puede suscitar la medida. Un espacio donde se han intensificado las consultas en las últimas tres semanas, según indica el edil de Movilidad, Francis Muñoz.
De este modo, los empadronados en Benidorm que paga el impuesto de circulación en la localidad no tienen que realizar ninguna gestión, aunque su residencia no esté dentro de la zona afectada. Aquellos que figuran fuera de la ciudad pero trabajan en estas áreas de Benidorm o tienen segunda residencia, pueden gestionar una autorización con una validez de un año. Al margen de estos dos supuestos, la iniciativa contempla el uso de los parkings de la localidad o el consumo en el comercio local como habilitante para ese acceso, justificándolo con el ticket de pago.
Asimismo, en este tiempo el Consistorio también ha autorizado a 90 colectivos para que sean ellos los que tramiten los permisos para sus clientes, según informó a Plaza el edil de Movilidad. Es el caso principalmente de empresas de alojamiento turístico a través de los procedimientos de entrada y salida del huésped. Incluso han habilitado una plataforma exclusiva para estos trámites.
La ZBE contempla varios supuestos, como la visita de familiares o amigos: el residente del área restringida contará con 10 permisos al mes para asignarlo a los vehículos que lo deseen. Además, aquellos que no sean residentes pero tengan una plaza de parking en propiedad podrán acceder a ella, aunque tendrán que tramitar una autorización a tal efecto. En cuanto a la zona azul, esta pasará a ser solo para residentes o trabajadores del área en cuestión.
Sanciones de la Ordenanza
Para la puesta en marcha de la ZBE el Ayuntamiento aprobó la modificación de la Ordenanza de Movilidad número 1. En esta se establecen las condiciones de cumplimiento así como las sanciones, que se definen de la siguiente forma. Se considerará infracción grave no respetar las restricciones de acceso, circulación y estacionamiento establecidas en las ZBE. En particular, mencionan el incumplimiento de la prohibición de circular o estacionar dentro de la ZBE por parte de los vehículos no contemplados en el Anexo V de la Ordenanza o que, estándolo, carezcan de la autorización necesaria y el estacionamiento de los vehículos de los residentes en la ZBE que no estén incluidos en el Anexo V de esta Ordenanza o que, estándolo, no cuente con la autorización necesaria, cuando estacionen en un área de estacionamiento que no les corresponda.
Esta misma regulación establece sanciones de 200 euros para las infracciones graves, importe al que podrían hacer frente los que no cumplan con las medidas impuestas desde este 1 de julio. "Espero y deseo que no haya que sancionar a nadie porque ha habido tiempo más que suficiente para poder darse de alta", manifestó el edil.