ELCHE. El pasado mes de octubre, la Generalitat aprobaba cuatro millones de euros para distintos proyectos vinculados a la innovación. Uno de ellos es el presentado por la ilicitana Greene, que ha abierto brecha con su tecnología de syngas y de revalorizaración de residuos industriales que está aportando a distintos sectores. En el caso concreto, ahora con una spin-off de la propia compañía, Greene W2H2, entra en el mercado del hidrógeno renovable, en el que aportarán su tecnología para una iniciativa que pretende conseguir alternativas para almacenar esta energía, uno de los problemas y retos de la misma.
Mejora del aislamiento térmico para un tanque de almacenado del hidrógeno
La premisa es estudiar la viabilidad de carbón activado, procedente de residuos, para mejorar las propiedades del aislamiento térmico del tanque encargado de almacenar ese hidrógeno renovable. Junto a Greene W2H2 participa Evatalking y la empresa matriz ilicitana, Greene. Participan también el Instituto Tecnológico del Plástico (Aimplas) y la Universidad de Alicante (UA), a través de su grupo de investigación materiales carbonosos y medio ambiente (MCMA). Han formado un consorcio denominado ‘Desarrollo de recubrimientos basados en EVA-carbón activado con propiedades aislantes para el almacenamiento de hidrógeno (Evacar)’.
El proyecto cuenta con una subvención de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) de 1.243.759,12 euros, repartido en tres anualidades desde este 2023 hasta 2025, en el marco del Plan Estratégico de la Industria Valenciana (Peiv).