MUTXAMEL. Tras casi cuatro meses de movilizaciones, la huelga indefinida en Avincis Aviation España puso punto y final. El 19 de noviembre, la dirección de la compañía y el Sindicato Libre de Trabajadores Aéreos firmaron un acuerdo que pone fin a un conflicto laboral iniciado el pasado 1 de julio y que marcó buena parte de la actividad del sector de trabajos aéreos en España durante el verano y el otoño. La plantilla de pilotos y técnicos aceptó la propuesta empresarial tras 116 días de paros y concentraciones, cerrando así una de las huelgas más prolongadas del sector en los últimos años.
El acuerdo supone una revisión parcial del convenio colectivo vigente y contempla mejoras inmediatas para el conjunto de la plantilla de Avincis Aviation España, tal y como publicaron medios especializados tras el acuerdo. Las medidas alcanzan a personal de pilotaje, copilotaje, rescate, tripulantes HEMS, personal sanitario y conducción, en una compañía con sede en Mutxamel que opera servicios aéreos de emergencia para distintas administraciones públicas en España y otros países.
Según el contenido del pacto, las partes han acordado incrementos salariales vinculados a la pérdida de poder adquisitivo acumulada, la incorporación de nuevos pluses por especialización y polivalencia, así como ajustes en las programaciones con el objetivo de aportar mayor estabilidad a los turnos. El acuerdo también incluye una mejora en la remuneración de las incidencias operativas y la creación del denominado "plus de fidelidad", un complemento que premia la permanencia en la empresa y que, por primera vez, se extiende a colectivos que no lo percibían hasta ahora.
El sindicato ha valorado el acuerdo como un punto de partida para avanzar en la negociación del resto del convenio colectivo. Empresa y representantes de los trabajadores se han comprometido a continuar el diálogo en los próximos meses con el objetivo de abordar otros aspectos pendientes en un marco sin conflictividad laboral.
Un conflicto prolongado en un sector esencial
La huelga de Avincis se produjo en un contexto de fuerte tensión en el sector de los trabajos aéreos, especialmente en actividades consideradas esenciales como la extinción de incendios, el rescate, el salvamento marítimo o el transporte sanitario. Durante los meses de verano y otoño, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico mantuvo en vigor una orden de servicios mínimos que garantizaba la operatividad de los medios aéreos contratados por el Estado, con especial atención a la campaña de incendios forestales.
Desde el inicio del conflicto, el SLTA había denunciado una pérdida sostenida de poder adquisitivo en la última década y jornadas laborales prolongadas, además de dificultades de conciliación y estabilidad en las programaciones. Estas reivindicaciones fueron el eje de las movilizaciones, que incluyeron concentraciones ante el Congreso de los Diputados y reuniones con distintos grupos parlamentarios para trasladar la situación del sector.
La mediación de la Secretaría de Estado de Trabajo permitió reactivar las negociaciones en la recta final del conflicto. El encuentro del 19 de noviembre fue el definitivo para desbloquear la situación y alcanzar un acuerdo que puso fin a los paros en Avincis, aunque no así en otras empresas del sector.
Contraste con Pegasus Aviación
Mientras Avincis cerraba el acuerdo, el conflicto laboral en Pegasus Aviación seguía abierto. En este caso, los trabajadores rechazaron la propuesta presentada por la empresa y decidieron mantener la huelga indefinida sin una fecha de finalización. Según el SLTA, las posiciones entre las partes permanecen alejadas, pese a que el sindicato asegura haber reducido sus pretensiones económicas.
La dirección de Pegasus, por su parte, sostiene que ha presentado todas las mejoras económicas posibles. Ante la falta de avances, la plantilla ha aprobado continuar con los paros y recurrir a las herramientas sindicales disponibles.
Actividad empresarial tras el fin de la huelga
El acuerdo laboral en Avincis llega en un momento de intensa actividad empresarial para el grupo con sede en Mutxamel. Pocos días después del fin de la huelga, la compañía anunció una alianza industrial con De Havilland Aircraft of Canada, mediante la cual transfiere a la firma canadiense sus certificados de tipo suplementarios para aeronaves de la familia Canadair CL. Esta operación permite que las soluciones técnicas desarrolladas por Avincis estén disponibles para otros operadores internacionales y refuerza su papel como proveedor de servicios de mantenimiento, diseño e ingeniería.
Avincis se define como el mayor proveedor de servicios aéreos de emergencia en Europa, con presencia también en África y Sudamérica. Opera desde más de 190 bases y cuenta con una flota aproximada de 210 aeronaves, entre helicópteros y aviones, además de una plantilla superior a los 2.500 profesionales. En España, gestiona contratos públicos relevantes, como el transporte aéreo sanitario en Andalucía y Castilla y León, además de servicios de extinción de incendios y rescate.
