ELCHE. Finalmente los vecinos desalojados del bloque 8 de San Antón no podrán volver para la recogida de enseres. Así lo ha confirmado este jueves el vicealcalde y edil de Urbanismo, Francisco Soler, ya que a pesar de que era una opción remota, finalmente los informes técnicos finalizados ahora determinan que "la zona que más problemática tiene y con problemas evidentes de colapso son las escaleras". No se podrá por tanto recuperar nada, aunque se están estudiando posibles opciones para casos puntuales mediante intervenciones de los bomberos, con acceso desde los balcones para pequeños elementos. Paralelamente, la Junta de Gobierno también ha aprobado las bases para las ayudas a las unidades familiares del inmueble.
Así, la única posibilidad de entrar es mediante intervenciones planificadas por los bomberos, "que podrían entrar a recuperar determinados pequeños enseres y de una forma muy ordenada y muy concreta en el tiempo, porque el peligro de colapso realmente existe y el informe técnico es muy claro". Algunos ejemplos podrían ser de extrema necesidad como teléfonos móviles, ordenadores portátiles u otros elementos como medicamentos. En todo caso, es algo que se tendrá que analizar caso por caso. Pero no será una fórmula que se pueda utilizar para retirar de las casas muebles o electrodomésticos.
Dos líneas de 120.000 euros, una para alquiler y otra para enseres
Respecto a las ayudas que se han venido contando, una subvención autonómica de 364.492 euros, será para todas las unidades familiares desalojadas, aunque eso sí, habrán dos vías, unas específicas para inquilinos, y otras generales para compra de mobiliario, electrodomésticos y ropa. 240.000 euros que se distribuyen en una línea de 120.000 euros para cada opción. El resto se ha destinado a abonar las estancias en hoteles que ha sufragado el Ayuntamiento de forma provisional, más una factura de un pequeño mobiliario como colchones o somieres que se tuvo que completar para dotar de emergencia esas viviendas adjudicadas por Pimesa (con precontratos provisionales hasta que se formalicen los normales) a quienes eran propietarios, más lo que costará lo que costarán dos alquileres desde hasta final de año. La dotación económica podría ser aumentada en 60.000 euros dependiendo de las circunstancias.
Optan a las ayudas todos, tanto los propietarios, como los inquilinos, como esas seis unidades familiares que han rechazado opciones ofrecidas por el Ayuntamiento —con las que no hay novedad—, como las personas que estaban en situación de okupación u "ocupaciones en precario". En estos casos irregulares solo podrá ser beneficiaria la unidad de convivencia que se encontraba en el inmueble en el momento del desalojo.
Las cantidades
En el caso de las familias para inquilinos, cada familia podrá optar a un máximo de 9.600 euros. Eso sí, no sería concedida mientras una unidad familiar esté en un recurso habitacional ofrecido por el Ayuntamiento, por lo que podría cobrarlo una vez salga de esa alternativa municipal y encuentre una propia. En cuanto a las familias propietarias, la mayoría en las viviendas que faltaban por ocupar en los pisos nuevos del barrio con esos precontratos, obtendrán una ayuda mínima de 600 euros y máxima de 3.000 euros, si cumplen cuatro ítems:
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Acreditar insuficiencia de recursos económicos para afrontar los gastos derivados de la situación de emergencia. La renta per cápita anual de la familia no podrá superar el 100% del Iprem vigente
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Estar empadronada la unidad de convivencia en Elche y en la vivienda desalojada con una antigüedad mínima de 6 meses
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Familias monoparentales y familias numerosas
- Que alguno de los miembros de la unidad de convivencia tenga una discapacidad en igual o superior al 33% o cuente con una resolución de grado de dependencia
La edil de Acción Social, Celia Lastra, estima que el próximo martes ya podrían estar publicadas en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) las bases, aunque se emplaza a los vecinos a que lo gestionen en la OMAC digital del barrio desde ese mismo día, donde un trabajador social estará asesorando.
Distribución en entidades, pisos de San Antón y barrios
Cabe recordar que hay algunas familias en casas cedidas por Cáritas, Fundación Conciénciate y Un Abrazo de Luz, porque ya tienen sus programas para estos casos. Son los casos de familias propietarias y por tanto con derecho a vivienda en propiedad en los pisos nuevos en San Antón. Sin embargo Pimesa solo disponía de 28 viviendas en los bloques nuevos, y eran 31 familias las propietarias. Asimismo, el Ayuntamiento a día de hoy solo está asumiendo dos alquileres de inquilinos desalojados, uno de una familia en el Raval y otra en una residencia de estudiantes. Y como ya se contó, los propietarios de los inmuebles del bloque 8 que tenían su casa en arrendamiento, serán las que puedan optar a la compra del futuro edificio de 45 viviendas.
Familias que rechazaron la alternativa habitacional
Por último, y sobre los casos que han rechazado la propuesta habitacional del Ayuntamiento, Lastra apunta a que ya no pueden hacer más. "El Ayuntamiento considero que ha cumplido de sobra con la emergencia" y añade que la situación no estaba para que cada cual pudiera escoger donde le viniera bien el alquiler, "si cerca de San Antón, si es que estaba en Carrús o en la Avenida de la Libertad", y arguye que los recursos eran limitados para estas alternativas. "¿Qué podemos hacer? Ojalá tuviéramos viviendas para todos en el bloque nuevo". No obstante, podrán optar a la línea de ayudas para el arrendamiento.
Y defiende que aquellas distribuciones en otros barrios de la ciudad se han hecho de acuerdo a la baremación y situación de vulnerabilidad de cada caso. Y defiende que el Consistorio hay entregado un documento para que firmen para justificar que la administración local ofreció los recursos que tenía disponibles en el momento. Y por ello defiende que se han quedado tres familias propietarias fuera, en pisos cedidos por entidades sociales.