ALICANTE. El grupo de Diseño en Ingeniería y Desarrollo Tecnológico (Didet) desde el laboratorio ArtefactosLAB de la Universidad de Alicante ha trabajado durante todo el Estado de Alarma en un prototipo de una máscara de snorkel que puede adaptarse, con la ayuda de una impresora 3D, para crear máscaras de seguridad para equipos médicos. Respecto a los riesgos de diseñar y fabricar dispositivos médicos a partir de iniciativas de innovación social, desde la asociación Artefactos, hablando de su propio caso, tienen capacidad tecnológica para validar el diseño, los materiales y los procesos de fabricación para que este tipo de dispositivos cuenten con la garantía de seguridad y eficacia necesarios para su uso en centros sanitarios.
No obstante, no dejan de crear innovaciones en su campo de especialidad, el de la ayuda para la adaptación para personas con discapacidad. El grupo ha desarrollado un exoesqueleto robótico de mano para trasmitir el movimiento al usuario que tenga poco o nada de movimiento a causa de trastornos neurológicos o fisiológicos. Este dispositivo es fabricado con material flexible, transpirable y resistente a líquidos mediante una impresora 3D y bajo unos parámetros de sostenibilidad económica, medioambiental y social. El grupo busca empresas o instituciones interesadas en continuar con esta labor de innovación social desarrollando el dispositivo o en el diseño y fabricación de otros nuevos.
Actualmente, aseguran desde el grupo en la UA, existen diferentes sistemas para ayudar a mover los dedos a aquellas personas que no pueden hacerlo. Por un lado, se encuentran los exoesqueletos para mano convencionales, compuestos por materiales rígidos y con un mecanismo complejo para su accionamiento, lo cual hace que su volumen sea muy grande y pesado y, por tanto, poco funcional para el usuario. Además, su mecanismo y volumen provoca que la suciedad se quede en los componentes y hace que el usuario no pueda utilizar el exoesqueleto hasta que se realice la limpieza de cada componente.