ALICANTE. La negociación del presupuesto de Alicante para el ejercicio de 2021 depara un giro inesperado: un nuevo acuerdo entre Cs y PSOE con 18 puntos a los que se supedita el respaldo de los socialistas a las cuentas, que trasciende justo un día después del anuncio de abstención formulado por Vox, con el que ya se garantizaba la aprobación de las cuentas por mayoría simple. Ahora bien, al margen de poder ampliar el respaldo a la aprobación de la propuesta de planificación económica para el próximo ejercicio, el pacto puede acabar tensando las costuras en el seno del propio bipartito, después del malestar que ya generó en las filas del PP el acuerdo suscrito entre Cs y PSOE respecto al catálogo de protecciones.
El acuerdo, suscrito por los líderes de ambas formaciones -Mari Carmen Sánchez (Cs) y Paco Sanguino (PSOE)- comprende la incorporación al presupuesto de 18 propuestas formuladas por los socialistas. Entre estas iniciativas, según han informado fuentes del PSOE, se contempla la "paralización del actual borrador de la ordenanza de convivencia cívica" con la intención de que el texto quede sustituido por "uno nuevo consensuado y basado en el documento de la FEMP". Además, el acuerdo incluye la "creación de dos servicios municipales diferentes en Acción Social; el aumento del presupuesto en Igualdad en un 15% sobre el borrador de Presupuesto de 2021" a cargo de una modificación presupuestaria posterior a la aprobación de las cuentas; "una mesa de trabajo para buscar soluciones para la recuperación económica y revitalización del tejido empresarial y la constitución de un censo de propietarios y residentes en la Zona Norte, entre otros puntos.
Sanguino ha destacado, a través de un comunicado, que "este acuerdo es entre el PSPV-PSOE y Cs", a la espera de que pueda recabar el beneplácito de PP. "Vamos a esperar a que sea ratificado por el pacto de gobierno, aunque por nuestra parte hemos dado por finalizadas las negociaciones. Si el pacto de gobierno no acepta los puntos firmados entre nuestro grupo y Cs, no contarán con un voto favorable de nuestro grupo en la aprobación de presupuestos".
El portavoz socialista ha indicado que "no pelear hasta el último segundo sin importar la clara impresión negativa que daba el bipartito sobre algunas reivindicaciones de la izquierda ha traído como consecuencia que nos hayamos quedado solos a la hora de defender algunas causas sociales, como la renegociación de la Ordenanza de Convivencia Cívica, pero es cierto que fuimos los que decidimos trazar esa línea roja y teníamos que ser los últimos en caer defendiéndola o sacarla adelante".
Así, ha asegurado que "entendemos que este año no se podía hacer la estatua y debíamos pelear hasta el final por la defensa de ciertos derechos que se habían visto comprometidos por las condiciones de la ultraderecha. Así que nos alegramos de que Cs no se haya plegado a ellas, al contrario de lo que ha hecho el PP, cuyo alcalde ha demostrado que se siente indudablemente más cómodo estableciendo alianzas ultra, tal como hemos visto con estos dos presupuestos y con su única capacidad de hacer oposición a otras instituciones y su incapacidad de llegar a acuerdos con nadie que no sean los ultras".
En esta línea, el PSOE incide en la "confianza de mantener líneas de colaboración con Cs que iniciamos con el catálogo de protecciones depende del cumplimiento de este acuerdo, por lo que nuestro voto en las modificaciones presupuestarias con el fin de cumplir los puntos ya está asegurado y mantenemos el interés de escuchar a Cs para otros acuerdos circunstanciales si lo consideran y siempre que reflejen una visión de centro-izquierda".