ELCHE. Aunque un 20% de las propuestas que presentará el Consell desde el tejido productivo para captar los fondos de reconstrucción europeos Next Generation EU vienen de Elche, con cuatro proyectos que pueden representar la inversión de más de 400 millones de euros en los próximos años en materia industrial, la vía institucional para pescar en estos fondos también se ha activado. Desde el Ayuntamiento se ha impulsado una comisión municipal de captación y gestión de estos fondos europeos y entre otras, priorizará actuaciones relacionadas con la eficiencia energética, el ciclo del agua o la movilidad sostenible entre pedanías.
A este respecto, la pasada semana el equipo de gobierno aprobaba una moción para impulsar esta comisión que estará formada por los coordinadores de área de los ejes de 'España Puede' —digitalización, sostenibilidad ambiental, cohesión social—, así como por los gerentes de Pimesa y Aigües d'Elx, aunque en fechas anteriores ya se había creado de facto una 'oficina técnica' para trabajar en esta línea. El plan en el que está trabajando el Consistorio se denomina 'Plan Elche Prospera 2021-2023', y ha presentado una primera remesa de 23 propuestas de actuaciones, aunque a priori, hay unas 4-5 que se manejan como las prioritarias. No obstante, acaban de arrancar este camino.
Autoconsumo de colegios y eficiencia en inmuebles de Carrús
Dos de ellas tienen que ver con la eficiencia energética, proyectos de largo recorrido para los próximos años que en cualquier caso, excederán de 2023, que es el horizonte que han marcado Estado y Generalitat para desarrollar las actuaciones para fondos europeos. Uno es el autoabastecimiento del algo más de medio centenar de colegios de la ciudad, de forma que instalando plantas solares en su tejado, fomente su autoconsumo —El Pla ya ha participado en una iniciativa europea similar—. Y la otra actuación, que es la de mayor calado e inversión de este plan, es la de la eficiencia energética orientada a las viviendas de Carrús, pendiente de actuaciones integrales. A la actuación pendiente de accesibilidad que se quería hacer en el barrio inicialmente —con la deuda histórica del Consell que sigue sin llegar—, se sumaría esa eficiencia energética, combinando ambas.