ALICANTE. Nuevo relevo en la oferta hostelera disponible en el Centro de Alicante. Ahora, en la calle Bazán. Se trata del aterrizaje de Santabar en el local que ha venido ocupando hasta ahora Pro Bar, que pasará a ofrecer el concepto de cocina del reconocido chef Dani Frías (titular del restaurante La Ereta, reconocido en la Guía Michelín) a partir de este próximo viernes.

La propuesta del nuevo establecimiento no es ningún secreto. Santabar (distinguido con un solete en la Guía Repsol) replicará el modelo de bar que ya ofrece en su primer local posicionado en el número 1 de la calle San Diego de la pedanía de Santa Faz. De hecho, se plantea reproducir su carta e incluso trasvasar a parte de su plantilla para contar con la experiencia acreditada de su personal.

Así, no faltará su particular ensaladilla, los buñuelos de bacalao, los torreznos con cebolleta encurtida, el pato a la brasa, el bocata de calamares picantón o la armónica de atún barbacoa a la brasa, entre otros de sus productos estrella. En suma, el nuevo Santabar no dejará de ser como su hermano mayor: un bar de toda la vida pero adaptado al siglo XXI, en el que se trata de reinventar y actualizar los platos tradicionales con el toque personal e innovador de Frías, sin perder de vista la centralidad del producto.

Nueva generación 

La llegada de Santabar a Bazán (a través de una operación de traspaso de local que contó con la mediación de la consultora especializada en el canal horeca, Inversale), se trata en realidad de un regreso, toda vez que el propio Frías fue, junto al chef Carl Borg, uno de los promotores de Pro Bar. Los dos chefs separaron sus caminos de forma temporal, y ahora vuelven a cruzarse con un acuerdo que comprende la cesión de uso del establecimiento, que dejará de ser Pro Bar para convertirse en un segundo Santabar.

Eso sí, su nacimiento se acompaña de otro hito de relevancia: el del relevo generacional. El Santabar 2.0 de la calle Bazán quedará a cargo de los dos hijos de Frías, Guillermo y Pablo, como encargados de dar un nuevo impulso al mismo concepto de bar tradicional tamizado por la modernidad. Los dos asumen el reto de acercar al Centro la propuesta planteada por su padre, en un nuevo establecimiento con capacidad para albergar a cerca de 90 comensales.