ALICANTE. Nueva vuelta de tuerca sobre el edificio del antiguo cine Ideal. El Grupo Baraka, que asumió la propiedad del inmueble a mediados de 2019, habría registrado una propuesta de modificación del proyecto inicial, con el que aspira a convertirlo en un hotel boutique de unas 63 habitaciones, con la intención de introducir cambios en su configuración y de reactivar la concesión de su licencia, pendiente de resolución desde hace más de cinco años. Cuando menos, así lo sostienen representantes de la plataforma Salvem l’Ideal (que promueve la conservación del edificio y su recuperación para un uso cultural público) quienes aseguran haber tenido acceso al expediente y haber podido constatar el envío de una última comunicación sobre los cambios propuestos, que la Concejalía de Urbanismo remitió a una de las filiales de Baraka (Ataraxia Ibérica) el pasado 13 de octubre.
En concreto, según Salvem, la propuesta de proyecto modificado -que Baraka no ha llegado a confirmar, a pesar de la consulta formulada por Alicante Plaza- comprendería una revisión de su propuesta primigenia con el objetivo de que se permitiese la apertura de hasta once vanos sobre las fachadas del inmueble, a modo de ventanales, que quedarían distribuidos, fundamentalmente, en la parte baja del edificio. Se trataría de un cambio que implicaría "el derribo de gran parte de la fachada de la planta baja de la avenida de la Constitución", según sostiene el colectivo en favor de la protección de la antigua sala de exhibición cinematográfica.
Al tiempo, según las mismas fuentes, la modificación del proyecto planteada por Baraka incluiría la demolición de los elementos que conforman su configuración interna y de parte de su cubierta, a pesar de que, como remarca Salvem, se trata de elementos protegidos o a proteger, mediante su incorporación en la ficha del catálogo de protecciones municipal, en función del requerimiento formulado por la Conselleria de Cultura tras la aprobación provisional de ese documento, hace ahora cinco años.
A juicio de la plataforma, la supuesta aceptación de esos cambios supondrían "la destrucción de los elementos que hacen del Ideal el mejor ejemplo de la arquitectura cinematográfica valenciana" y una de las únicas muestras -sino la última- de los cines monumentales de principios del siglo XX que todavía perviven y que, este año, acaba de cumplir, precisamente, cien años desde que proyectase su primera película.
En todo caso, al margen de la advertencia sobre las implicaciones de ese cambio, representantes de Salvem también alertan de la anomalía que, en su opinión, supondría que la Concejalía de Urbanismo admitiese a trámite esa propuesta de modificación de proyecto. En este sentido, el colectivo intrepreta que, en ese supuesto, se estaría concediendo un plazo extra para tramitar la propuesta, cuando -según sostienen- debería darse el expediente de solicitud de licencia por cerrado.
El colectivo incide en que esta última modificación del proyecto sería la sexta promovida por Baraka desde el inicio de su tramitación, sin que se haya acordado su caducidad, a pesar de que el grupo empresarial no habría respondido a los requerimientos municipales formulados prácticamente desde su registro inicial. Según la plataforma, ya en agosto de 2020, el Servicio de Disciplina Urbanística requirió a Baraka "una subsanación, que esta no hizo en tiempo y forma". Entonces, "en lugar de constatar el desistimiento de la propiedad y cerrar el expediente, el mismo Servicio lo dejó abierto hasta que pidió a la propiedad en febrero de 2022 que aportara 'las alegaciones y los documentos que estime oportunos en derecho'". No obstante, según Salvem, "la propiedad ni siquiera respondió".

- El interior del antiguo cine Ideal. -
- Foto: RAFA MOLINA
De nuevo, a pesar de todo, el expediente siguió en trámite hasta que, "en enero de 2024 el Servicio volvió a permitir a la propiedad que 'alegue y presente los documentos y justificaciones que estime pertinentes'". De este modo, según Salvem, "el escrito notificado a la propiedad el 13 del mes pasado es, por lo tanto, la cuarta oportunidad que se le da para alegar y presentar enmiendas. Nos preguntamos si el Servicio de Disciplina Urbanística y Ambiental le da estas facilidades a todos los particulares", recalcan las mismas fuentes. En cualquier caso, Salvem incide en que ha presentado una nueva solicitud para que se deniegue la licencia solicitada, con argumentos similares a los que ya expuso en 2023 y en 2024.
Tramitación escrupulosa
¿Qué expectativas puede tener Baraka en que se admita esa modificación de proyecto apuntada por Salvem? Se trata de una cuestión por resolver. Por el momento, fuentes municipales consultadas por este diario se limitaron a señalar, este miércoles, que el expediente "se está tramitando siguiendo escrupulosamente, como en todos los expedientes, la normativa vigente, incluyendo la relativa a la protección del edificio". En esa tramitación, se ha incluido, además, la solicitud de suspensión de plazos registrada por el mismo grupo Baraka con la intención de replantear su proyecto, según pudo confirmar este diario.
Sea como fuere, fuentes municipales señalan que "el Ayuntamiento descarta tajantemente que se vayan a autorizar obras que contravengan la normativa urbanística y las restricciones derivadas de la protección del edificio, habiéndose solicitado los informes técnicos internos preceptivos que estudien la viabilidad, en su caso, del proyecto presentado", sin llegar a confirmar que se haya registrado esa sexta modificación del proyecto inicial que comprendería la apertura de once vanos y demoliciones internas, según Salvem.
Al tiempo, las mismas fuentes señalaron que "es necesario recalcar que cualquier actuación sobre el inmueble deberá ser autorizada por la Conselleria de Cultura, que es quien tiene la última palabra" al tratarse de un edificio que quedaría sujeto a un "régimen excepcional" ante la provisionalidad del catálogo de protecciones, que sigue pendiente de la Concejalía de Urbanismo introduzca las últimas adaptaciones planteadas por la Generalitat. Por lo pronto, fuentes consultadas indicaron que Baraka ya habría mantenido contactos con Cultura para tratar de ajustar su proyecto de hotel a los requisitos de protección que pueda establecer el departamento autonómico. Con todo, no han trascendido los resultados de esos contactos hasta ahora.