ALICANTE. La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, conocida como Euipo por su acrónimo en inglés, da un paso definitivo con el que aspira a mejorar y completar los servicios de los que dispone en las instalaciones de su campus, en la partida de Aguamarga de Alicante. La euroagencia (el organismo que vela por la protección de diseños, patentes y marcas en el ámbito comunitario) acaba de registrar un proyecto con el que solicita licencia para que los tres edificios de uso administrativo que conforman su recinto puedan albergar otros usos terciarios vinculados a su actividad principal. Básicamente, se trataría de la instalación de pequeñas tiendas, zonas de restauración o incluso despachos profesionales que puedan satisfacer las necesidades de sus trabajadores: una plantilla compuesta por cerca de 1.5000 funcionarios. 

En suma, la propuesta (que sigue sujeta a evaluación por parte de los técnicos de la Concejalía de Urbanismo) pretende que se habilite el marco necesario para que el complejo pueda regular algunos servicios ya implantados e incorporar otras prestaciones nuevas similares a las que podrían encontrarse en el casco urbano de cualquier ciudad, sin necesidad de que sus empleados tengan que desplazarse para realizar acciones o gestiones cotidianas como comer, sacar dinero en un cajero, comprar en una óptica o ir al gimnasio, por ejemplo.

Esos son algunos de los tipos de negocio que quedarían amparados por el paraguas de esa licencia, como se detalla en el proyecto, al margen de las autorizaciones de las que ya disponen los tres inmuebles principales que componen la euroagencia desde su construcción, entre 1998 y 2018. El objetivo no es otro que "aclarar y regular" esas otras actividades complementarias al uso administrativo principal que, según la Euipo, resultan "necesarias para el mejor funcionamiento del complejo", y que hasta ahora no habían quedado definidas por las licencias de actividad precedentes.

Una vez obtenido ese permiso marco, la explotación de esas actividades quedaría a disposición de titulares ajenos a la euroagencia, que gestionarían como concesionarios los espacios que puedan habilitarse para esos fines en los tres inmuebles que conforman el complejo, con la particularidad de que solo estarían al alcance de los trabajadores y usuarios autorizados de la propia Euipo. Es decir, con uso en condiciones de exclusividad para los eurofuncionarios, sin la posibilidad de disfrute por parte de la ciudadanía general. "La explotación de cada una de las actividades podrá desarrollarse por empresas externas a la Euipo mediante el correspondiente contrato de concesión del espacio necesario y cumpliendo con los condicionantes previstos en el presente documento y con toda la normativa que resulte de aplicación", añade el proyecto.

¿Qué tipo de actividades complementarias tendrían cabida en el campus? El proyecto señala de forma expresa tipologías de negocios relacionadas con el comercio minorista, la prestación de servicios de salud, bienestar y hogar, servicios lúdicos y de entretenimiento, servicios de restauración, oficinas comerciales o servicios de mejora de movilidad y transporte. Y entra al detalle respecto a cada uno de ellos. En cuanto al uso terciario comercial, la propuesta enumera la posibilidad de amparar tiendas dedicadas a la venta de productos de alimentación y cotidianos, de productos de consumo ocasional, o a la mezcla de ambas gamas de productos, como un quiosco, una panadería con o sin obrador, una parafarmacia, la instalación de servicios de vending o, incluso, la implantación de un punto de recogida de productos, adquiridos a través del comercio electrónico.

Además, también se da cabida a actividades terciarias relacionadas con la prestación de servicios personales como un gimnasio, una clínica de fisioterapia, una óptica, un negocio de limpieza de vehículos automóviles en seco, un taller de reparación de bicicletas y vehículos de movilidad personal (VMP), una academia de idiomas o talleres lúdicos. De igual modo, se pretende incorporar negocios relacionados con el sector de la hostelería como cafetería, restaurante, comedores con o sin servicio de cocina o servicios de catering. 

Y, por último, también quedarían acogidos otros usos de tipo cultural como la disposición de salas de exposiciones temporales o permanentes, así como oficinas profesionales al servicio de los usuarios de la Euipo cuya función principal sea "la prestación de servicios administrativos, técnicos, financieros, de asesoramiento, gestión y similares", ajenas a la actividad principal de oficinas de la administración realizada por la propia Euipo. Entre ellas, se incluirían negocios del tipo de una agencia bancaria, agencia de seguros, agencia postal, servicios de paquetería, servicios jurídicos, consulta médica o asesoría/gestoría, entre otros.

Tres inmuebles

¿Dónde se encuadrarían esos servicios complementarios a la actividad principal de la euroagencia? El proyecto prevé que puedan distribuirse en distintos espacios habilitados para ello en los tres edificios que conforman el campus de la eurogencia, con la particularidad de que circunscribe a los garajes en plantas sótano las actividades de lavado en seco de vehículos y reparación de bicicletas y VMP. De ahí que no se incluya la ejecución de obras adicionales. Ni tan siquiera para crear nuevas plazas de estacionamiento, ya que "los usuarios de estas actividades serán únicamente los de la actividad principal" y, por tanto, sus necesidades ya estarían cubiertas.

De este modo, el proyecto se limita a enumerar las características de los tres edificios preexistentes, sin contemplar una hipotética ampliación. En primer lugar, detalla que el edificio AA1 fue el primero del campus en ejecutarse, en torno a los años 1998-2000. Su uso principal es el de oficinas con garaje en plantas sótano y está conectado en todas sus plantas con el edificio AA2. Cuenta con una estructura diferenciada en siete plantas sobre rasante, más tres plantas de sótano en las que se sitúan los estacionamientos.

El edificio AA2 se construyó después, en torno a los años 2013-2014. Se trata de un edificio en forma de 'H' que también se une al edificio AA3 mediante un túnel en su primer sótano y pasarela exterior "a nivel de planta segunda". Su uso principal es el de oficinas con garaje y consta de 5 plantas sobre rasante y otras tres de sótano, en las que se distribuye el auditorio del campus. Por último, el edificio AA3 se construyó entorno a los años 2017-2018. Se trata de un edificio también en forma de 'H'. Cuenta con cinco plantas sobre rasante más dos de sótano, en las que se ubica un salón de usos múltiples.