ALICANTE. No es ningún secreto: la competencia desatada entre los operadores ferroviarios en el corredor de alta velocidad entre Alicante y Madrid ha disparado el uso del tren como medio de transporte preferente. Así se viene corroborando en los informes trimestrales que elabora la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la evolución de los tráficos en el conjunto de la red nacional. Y ahora queda confirmado en un último informe elaborado por el mismo organismo, en el que se concreta que el ferrocarril ha ganado paulatinamente presencia como opción preferente frente al avión o el vehículo privado para cubrir ese desplazamiento entre las dos capitales hasta suponer una cuota del 89,1% con datos cerrados hasta 2024.
Esa cifra supone un incremento del 1,4% respecto a 2023, que se eleva hasta el 5,6% si se compara con los registros de 2019. Es decir, cuatro años antes de que la liberalización del sector llegase a Alicante con el estreno de los nuevos recorridos ofertados por Avlo, la marca de bajo coste de Renfe. Su estreno se produjo a finales de marzo. Ouigo le siguió los pasos un mes después. Y el tercer turno fue para iryo, que comenzó a ofertar el mismo trayecto en junio de ese mismo año.
El informe de la CNMC concreta que el crecimiento del tren frente a otras opciones de movilidad es el resultado lógico del incremento de la oferta, acompañado de un descenso de los precios de los billetes que, en el primer trimestre de este año (el último periodo analizado por la CNMC de forma pormenorizada hasta ahora) se sustanció en una reducción media de hasta el 18,9%, respecto al mismo periodo de 2024. Así, el mismo estudio señala que, en el caso del eje Alicante-Madrid, se ha pasado de una media diaria de 19,5 frecuencias (viajes en los dos sentidos) en 2019 a las 39,8 que se ofertaron en 2024. De ahí que la CNMC también de cuenta de que la estación de Alicante -junto a las de Valencia y Málaga- haya experimentado incrementos de uso superiores al 50%.
Evolución nacional
En lo que respecta a la evolución del conjunto de corredores de alta velocidad, la CNMC apunta que el ferrocarril registró 49 millones de viajeros en 2024, un 42% más que antes de la liberalización (2019). Además, se destaca que la entrada en juego de operadores privados "ha supuesto un beneficio para la sociedad de 503,9 millones" y que "los viajeros han sido los más beneficiados, con unos ahorros estimados de 431,3 millones de euros en 2024 en comparación con 2019". De hecho, el estudio remarca que uno de los efectos propiciados por la incorporación del sector privado ha sido un descenso medio del 33 % (44 % contando la inflación) en los precios de los billetes de la alta velocidad.
Además, según el informe, la liberalización ha generado un trasvase de viajeros del avión (0,9 millones de pasajeros) y de la carretera (3,7 millones) al tren, con un ahorro estimado de 171,8 millones en costes externos (menos polución, emisiones, accidentes, congestión y ruido). De igual modo, el estudio señala que Adif, el administrador de la infraestructura ferroviaria en España, ha ingresado más por los cánones, debido a la mayor actividad ferroviaria, lo que le ha reportado una ganancia neta de 133,3 millones. No obstante, también añade que las empresas ferroviarias, a pesar de haber mejorado resultados en 2024, han pasado de tener 133 millones de beneficios en 2019 a registrar pérdidas de 99,5 millones en 2024.