ALICANTE. El conflicto laboral planteado en el Ayuntamiento de Alicante con efectivos del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios (SPEIS) debería quedar solventado antes de la celebración de las próximas fiestas de Fogueres. Cuando menos, así lo ha augurado el alcalde, Luis Barcala, en una comparecencia pública tras celebrar el acto de recepción institucional con las belleas del Foc de 2025 y sus damas, hasta el punto de estar convencido de que se alcanzaría un entendimiento a cuenta del listado de reivindicaciones de mejoras laborales, organizativas y salariales planteada por la Plataforma que agrupa a más del 50% de la plantilla.
En esta línea, el primer edil ha sostenido que "ya hubo una primera ronda de negociación con los sindicatos" -no con la Plataforma- "que creo que fue muy satisfactoria para todas las partes" y que se mantiene abierta, con la previsión de que pueda volver a celebrarse un nuevo encuentro esta misma semana, sin que llegue a cumplirse la advertencia de plante durante el desarrollo de las fiestas de San Juan.
Así, Barcala ha indicado que se mantiene el "espíritu" de seguir negociando para avanzar "dentro de las posibilidades que tenemos" para "llegar a acuerdos". "Estoy convencido de que las reivindicaciones que eran razonables ya fueron confirmadas en la anterior reunión" por lo que se ha mostrado convencido en que se seguirá avanzando. "No es una cuestión de dinero, porque en diciembre ya habíamos llegado a un acuerdo respecto a las gratificaciones" que debían percibir los bomberos que participasen en el dispositivo especial de la Nit de la Cremà, en las próximas fiestas. En esta línea, ha recalcado que se trata de seguir dialogando sobre "condiciones que tienen que ver mucho sentido". "Hay receptividad por parte del equipo de gobierno y voluntad de negociar por parte de los sindicatos; con total seguridad llegaremos a acuerdos para que todo el mundo esté tranquilo y todo el mundo haga su trabajo; y las hogueras no sean moneda de cambio de nada", ha incidido. "Las hogueras, a disfrutarlas, y la gente, a tener sus condiciones laborales como se merecen", ha incidido.
Todo, después de recordar que el expediente que se abrió tras el protesta protagonizada por miembros de la Plataforma de Bomberos en el transcurso del pleno ordinario de marzo sigue abierto, sin que se haya cerrado una propuesta disciplinaria frente a lo que el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), calificó como un intento de asalto al pleno, que motivó que se ordenase a la Policía Local el desalojo de los manifestantes. "Veremos las circunstancias: si hay un buen ambiente de negociación y vamos todos de la mano a buen puerto y nos dejamos de ruido que exceda de lo razonable... hay cosas que no son aceptables, y creo que todos los sindicatos y la plantilla rechazó que se hiciesen determinadas cosas, pero eso no califica ni al colectivo, ni califica a la plantilla municipal", ha explicado. En todo caso, ha sostenido que ese expediente no condiciona la negociación.